En un año, PIB per cápita en Colombia perdió US$1.000 por devaluación

Una semana después de que el dólar llegara a $3.459, su promedio más alto en toda la historia, el lunes, la divisa estadounidense logró su segundo promedio más caro, ya que se cotizó a $3.436,35 y ganó $53,64 frente a la Tasa Representativa del Mercado (TRM), que se ubicó en $3.382,71, afectando cuentas nacionales como el PIB per cápita o la deuda externa.

La moneda abrió la jornada con un valor de $3.445 y su cierre fue de $3.426. Además, el precio mínimo que se registró durante la jornada fue de $3.419,50, mientras que el máximo fue $3.462,50.

A finales de la semana pasada, a pesar del contexto internacional en cuanto a las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, y de la aparente desaceleración de las economías desarrolladas; la tasa de cambio se había empezado a estabilizar y el dólar se estaba cotizando nuevamente por debajo de $3.400.

Sin embargo, los resultados de las elecciones en Argentina, celebradas el domingo, que tuvieron una amplia victoria del Peronismo, impactaron en el peso colombiano y en las demás monedas emergentes de la región, lo que llevó a que estas se devaluaran frente al dólar.

“Las elecciones en Argentina castigan mercados emergentes luego de la sorpresa de este fin de semana que deja un panorama sombrío en la región. El riesgo de un nuevo incumplimiento se asoma en el sur del continente ante la muy posible llegada de la oposición peronista al poder, una pesadilla para todos los inversionistas que seguramente saldrán esta semana en desbandada de la zona”, explicó José Luis Hernández, trader de Corficolombiana.

Así, en un año, al comparar la TRM del 13 de agosto del año pasado ($2.940,95) con el precio promedio al que cerró ayer ($3.436,35) razón por la que la TRM de hoy estará en $3.436,26, la más alta de la historia, el peso se ha devaluado 16,84%. En este sentido, el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de los colombianos ha caído cerca de US$1.000.

Considerando que, de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), el PIB de 2018 sumó $978,48 billones y al dividirlo entre 48.258.494 colombianos que la entidad estima que es la población del país, el PIB per cápita es $20,28 millones. Al convertir este dinero haciendo uso de la tasa de hace un año y de la actual, los colombianos tuvieron una pérdida de US$993,91, pues pasaron de tener un PIB per cápita de US$6.894,29 a uno de US$5.900,37.

Con la volatilidad de la tasa de cambio, igualmente, el PIB del país disminuyó US$47.964,68 millones, ya que pasó de US$332.707,82 millones a US$284.743,13 millones.

En el caso de la deuda externa, que según el Banco de la República para el primer trimestre se ubicó en US$132.794 millones, al aumentar el precio del dólar, esta es 16,84% más costosa que hace un año.

Con la tasa del año pasado, la deuda era de $390,54 billones, mientras que con el valor actual de la divisa, esta se eleva a $456,33 billones. La diferencia es de $65,79 billones.

Otras cuentas que monetariamente también aumentan con la devaluación del peso colombiano son las importaciones y las exportaciones.

De acuerdo con la información suministrada por el Dane, en mayo, las compras a otros países sumaron US$4.582,17 millones, mientras que las ventas al exterior fueron de US$3.765,05 millones.

Con el propósito de mirar el efecto de la tasa de cambio en las compras internacionales, al valor en dólares de lo adquirido en el exterior en mayo se le convirtió en pesos haciendo uso de la tasa de hace un año y luego de la tasa actual.

En este sentido, si el dólar todavía se cotizara a $2.940,95, el monto de las importaciones sería $13,48 billones, mientras que con el precio promedio de la jornada del lunes, el valor de las compras al extranjero se sitúa en $15,57 billones.

Con la tasa de cambio de hace un año, el valor de las ventas al exterior en mayo sería de $11,07 billones, mientras que con la tasa actual este llega a $12,94 billones.

Como se puede comprobar con este ejercicio, en teoría, un dólar más alto es contraproducente para las importaciones, ya que encarece la compra de bienes y servicios, y es beneficioso para las exportaciones porque reciben mayores ganancias.

Edwin Rey, analista de renta fija de Global Securities, explicó que bajo estas condiciones, teóricamente, el país sería más competitivo, pero hasta el momento no se ha visto ese efecto y, de hecho, es posible que en el escenario actual no ocurra.

“Ahora el PIB lo lidera el consumo de los hogares, el cual puede ser afectado por el precio de las importaciones. Con una tasa alta, los hogares tendrían que gastar un poco más por lo que habitualmente consumen, lo que puede frenar un poco el gasto”, señaló.

En este mismo sentido, Eduardo Sarmiento, director del Centro de Estudios Económicos de la Escuela Colombiana de Ingeniería Julio Garavito, señaló que esta reducción del consumo conducirá a una mayor tasa de desempleo y a que la economía crezca por debajo de 3%.

“Este aumento en el precio de la divisa aumentará el déficit de la cuenta corriente, que ya es de los más altos en el mundo. Lo que el país necesita es producir bienes intensivos en capital y que el mundo esté demandando, como tecnología. Actualmente, estamos exportando bienes que casi nadie demanda y la productividad es baja”, destacó.

Los analistas consultados consideran que la alta tasa es producto de la coyuntura y estiman que en el mediano y largo plazo esta volverá a bajar y no tendrá un impacto estructural en las cuentas nacionales.

Vale la pena mencionar que con el recorte que la Reserva Federal hizo a sus tasas de interés, el peso colombiano y las divisas de otras economías emergentes se deberían estar revaluando frente al dólar, pues en estos países la rentabilidad es más alta.

Sin embargo, dadas las tensiones comerciales y la posible desaceleración económica, la aversión al riesgo es alta entre los inversionistas y por eso prefieren recurrir a activos refugio como el dólar, el oro, los bonos del Tesoro o el franco suizo.

Precios del petróleo cierran al alza a pesar de los temores por menor demanda
De acuerdo con los precios de cierre reportados por Reuters, tanto las referencias WTI como Brent de petróleo se cotizaron al alza en la jornada del lunes. El precio del barril del primero aumentó a US$54,93, mientras que el segundo llegó a US$58,57. Los mayores precios se registraron a pesar de la menor demanda de los mercados debido a la guerra comercial entre China y Estados Unidos. Estos temores fueron compensados por la expectativa de que los grandes productores de crudo sigan reduciendo el suministro.