“Estamos jugando con la cancha inclinada”, señala el presidente de Fecolfin

Con las cooperativas hay un tema de confianza importante, ¿cómo han transmitido eso al usuario?
Hay un concepto, yo diría que un poco peregrino por parte del Gobierno y de muchos entes que le cargan al ahorro y crédito una desconfianza, sobre todo desde el punto de vista del sector cooperativo, y lo más importante es lo que la Constitución establece, que es que nosotros tenemos que responderle al ahorrador. Lo primero que tenemos es el fondo de garantías. Estas entidades están inscritas a Fogacoop que responde hasta con $8 millones  por persona en caso de que haya un siniestro o un desastre. Además, todas las entidades tienen un patrimonio propio, es decir, un capital propio, que llamamos capital institucional, por $570.000 millones. 

¿Y la participación en programas del Gobierno?
Nosotros lo que estamos diciendo es miren tenemos suficientes herramientas y suficientes recursos para responderle en caso de que se presente algo, de ahí que no compartimos la desconfianza que hay en los funcionarios del Gobierno, cuando siempre le ponen obstáculo a las cooperativas de ahorro y crédito para no abrirles el camino que requieren, entonces a usted lo ponen a jugar con la cancha inclinada, porque a nosotros siempre nos ponen a jugar hacia arriba. Lo que estamos diciendo al Gobierno es liberemos la cancha para que juguemos en igualdad de condiciones. 

¿Qué sectores tienen mayor potencial para ustedes?
El mayor aporte que se puede hacer ahora es en el sector agropecuario y me parece que desde el punto de vista de las cooperativas de ahorro y crédito este es el instrumento porque tiene varias connotaciones, primero tenemos la experiencia y la experticia para hacerlo. 

Queremos proponerle al Gobierno dos cosas, la primera es que podemos ser los actores en la mayor parte de los recursos que quieren colocar a los campesinos colombianos, pero podemos hacer alianzas o ser actores con recursos del Estado para hacer asistencia técnica y mercado para los canales de comercialización para los productos que se tengan. Sino se instrumentalizan en esa forma, pueden los créditos fracasar. Nosotros estamos en condiciones de hacer eso. 

Desde su experiencia al frente de la Supersolidaria, ¿qué modificaciones deberían hacerse en términos de normativas para estas cooperativas? 
Hay que dividir dos cosas, una es regulación y otra  supervisión, en materia de regulación a estas entidades las tienen asfixiadas y estigmatizadas, porque cada que toman una política debemos ir ante el Gobierno para que nos incluya, como el caso de los corresponsales bancarios. Y en materia de supervisión, me parece que debe ser una supervisión más preventiva que una supervisión asfixiante.