Los créditos rotativos han caído 13% en un año según cifras de Asobancaria
martes, 26 de junio de 2018
Aunque parece una solución similar a una tarjeta de crédito, no tiene el mismo comportamiento. Acá están las diferencias
Necesitar dinero adicional y asociarlo directamente con las tarjetas de crédito puede llegar a ser un gran error, ya que manejarlas inadecuadamente puede hacer que los usuarios incurran en mayores gastos, y es por eso que es bueno que las personas sepan que hay otras soluciones en el sistema financiero. Este es el caso de los créditos rotativos que consisten en un cupo permanente de crédito para que los usuarios tengan efectivo y pueda ser transferido a una cuenta de ahorros o corriente.
Y aunque parece una solución similar a una tarjeta de crédito, no tiene el mismo comportamiento, lo que también se ha evidenciado en las cifras de desembolso. Según señaló Asobancaria, el número de desembolsos de este tipo de créditos tuvo una caída de 13% respecto a 2016, al reportar 235.000 desembolsos, lo que significó 35.000 créditos que se dejaron de entregar el año pasado.
Teniendo en cuenta que las tasas que manejan estos créditos son similares a las que ofrecen los bancos en las tarjetas de crédito, a marzo de este año bancos como Bancolombia, AV Villas, Banco de Occidente, Banco Popular, Davivienda y otros, manejan cobros efectivos anuales que se ubican entre 20,34% y 30,77%, teniendo como promedio 28,58% de tasa de interés, que comparada con el promedio de 2017 que fue de 30,10%, lo que significó una disminución de 5,34 puntos porcentuales.
A pesar de esta considerable baja de tasas, la disminución en el desempeño económico del país, también se vio reflejado en este tipo de crédito, pues el monto real de los desembolsos también presentó una desaceleración de 11% durante el año pasado.
Pero ¿en qué radica específicamente la diferencia que existe entre estos créditos y las tarjetas de crédito? Jorge Saza, asesor financiero, explicó que “las tarifas que manejan estos créditos son muy similares a las tasas de las tarjetas de crédito, pero la diferencia radica en que los bancos aprueban un cupo y los usuarios lo usan cuando deseen pero en efectivo, y se usan para atender emergencias y el cupo es más alto. Se usa una vez, se va pagando y se puede saldar igual que una tarjeta de crédito, por eso la diferencia es que la tarjeta permite un consumo y el rotativo entregan el dinero al usuario”.
Dentro de las características que tiene este tipo de crédito es que “el cupo utilizado se difiere automáticamente a un determinado número de cuotas, según las políticas de cada entidad financiera, lo que le permite al cliente manejar cuotas más bajas las cuales se ajustan al flujo de caja. E igualmente dentro de sus características está que tiene una tasa de interés fija y no cuenta con asistencias ni programas de fidelización”, dio a conocer Asobancaria.
Ahora, los usuarios también deben tener en cuenta otra característica importante, y es que este tipo de crédito se puede dar en dos modalidades: uno revolvente y otro no revolvente. El primero tiene como característica que todo el saldo de capital del cupo se re-difiere automáticamente a un solo plazo y tasa, mientras que en el no revolvente cada utilización se liquida a una tasa y un plazo determinado.
Sebastián Mora, director de productos para personas de Bancolombia, explicó que en la entidad colombiana tiene ”tasas de intereses diferenciales de acuerdo al cliente, que van desde 1,55% M.V (20,34% E.A), y es que cada desembolso de Crediágil es independiente y tiene sus propias características respecto a la cuota mensual de acuerdo al monto desembolsado, al plazo y a la tasa de interés vigente al momento del desembolso”.
Como explicó el directivo además en Bancolombia el cliente puede hacer pagos extras a capital o cancelación anticipada de sus desembolsos, y adicional a ello cada uno de los desembolsos de Crediágil está cubierto por un seguro de vida, lo que da un plus a los clientes respecto a tranquilidad en caso de incapacidad total o muerte.
Y aunque parece ser una solución ideal, según cifras de Asobancaria el estado de esta cartera no es la mejor, ya que desde julio del año pasado ha presentado una tendencia decreciente.
Como informó la entidad “la calidad de la cartera también se ha visto afectada. Si bien presentó una leve tendencia de recuperación desde noviembre de 2017, esta se revirtió en enero del presente año hasta registrar en la actualidad niveles del 7,7%”. Por eso para Asobancaria no es evidente una tendencia clara de recuperación”.
Otras formas de financiación que hay en el sistema
Para aquellos usuarios que tienen en mente adquirir productos como carros, maquinaria, vivienda o herramientas para las empresas , el sistema financiero ofrece soluciones como la modalidad de leasing el cual consiste en un sistema de arrendamiento que hace que los usuarios puedan alquilar un activo a mediano o largo plazo, pero que queda a nombre del banco hasta completar el pago. A abril de este año las entidades que lideran en cartera y leasing bruto son Bancolombia, Davivienda y Banco de Bogotá.