“Los neobancos son una nueva orientación de los servicios que expande el mercado"
lunes, 5 de febrero de 2024
José Alejandro Cortés, miembro de la junta directiva del Grupo Bolívar, dijo que uno de los retos de 2024 es la inflación por lo que aseguró que hay que dejar trabajar al Emisor
José Alejandro Cortés estuvo durante 55 años al frente de la dirección del Grupo Bolívar, una sociedad que agrupa a empresas como Davivienda, Seguros Bolívar y Constructora Bolívar, y que en 2022 reportó ingresos por $1,38 billones y una utilidad de $1,17 billones, según cifras registradas en la Supersociedades.
Aunque se retiró de la presidencia del Grupo Bolívar hace más de una década, en marzo de 2011, es miembro principal en la Junta Directiva y su visión empresarial es clave en las decisiones que definen el rumbo empresarial de esta organización.
Con esa visión de empresario, inversionista y hacedor de país, Cortés reconoció que si bien 2024 será un año complejo (porque el gran reto es crear empleo), destacó también que las empresas en Colombia siempre han sido resilientes.
El Grupo Bolívar tiene varias empresas en sectores estratégicos, ¿cómo ve el panorama en lo financiero, la construcción y los seguros?
El panorama no ha sido fácil y por varias razones. Primero, por una situación global que ha afectado a todas las industrias y empresas del país, y me refiero a la situación de los conflictos armados en Europa, Asia y Medio Oriente. Eso ha afectado la parte relacionada con las importaciones y como consecuencia de todo eso hemos tenido un efecto inflacionario bastante evidente. Esa situación en general ha implicado varias cosas: inflación y tasas de interés altas.
Desde el punto de vista de nuestros clientes, resulta una situación muy compleja, difícil, porque para todos ellos se ha subido el crédito y muchos no han podido atender adecuadamente sus obligaciones.
Consecuencia de eso, el sector bancario, en general el financiero, se ha visto afectado negativamente. En otras palabras, esto afecta a todas las empresas, no es solo a los bancos, incluso a los clientes, a los cuales nosotros les facilitamos los recursos.
¿Y en seguros y construcción cómo ve el panorama?
En seguros el efecto no ha sido tan grave. Los seguros se han seguido atendiendo relativamente bien. Las empresas, dentro de lo que son los seguros empresariales, son muy conscientes de la necesidad de estar al día porque el riesgo que pueden correr es alto.
Desde la construcción, sí hemos visto dificultades que son consecuencia también de las altas tasas e inflación. Los compradores de vivienda han creído que no es posible atender adecuadamente sus obligaciones con unos intereses tan altos y pues, desde el punto de vista de la vivienda de interés social, los subsidios se han visto afectados tanto en el número como en la forma como se reconocen los subsidios a los posibles compradores, entonces, eso ha afectado a los constructores también, quienes a su vez han tenido dificultades con sus bancos y créditos.
¿Se puede enderezar el camino?
Creo que el camino se va a enderezar solo, porque las empresas tienden a adecuarse a la situación que viven. Incluso, a veces, con algunas decisiones difíciles como la disminución del empleo. Por ejemplo, veo que en la construcción habrá una reducción importante.
¿Entonces este año no salimos del panorama complejo?
Al menos en empleo. Creo que la solución no está clara, ni a la vista. Yo veo que la inflación va a reducirse bastante, pero hasta finales de año. Estamos hablando de 6%, según las proyecciones. La situación no va a estar fácil y en el campo donde estamos nosotros, va a seguir difícil.
¿Esperan altos niveles de morosidad en 2024?
Sí, pero hay que aclarar y destacar que no son tan altos como los que tuvimos el año anterior.
El presidente Petro ha dicho que el Banco de la República debe bajar aún más las tasas
Creo que es muy fácil decir “es que esto es así”. Tenemos un grupo directivo en el Banco de la República muy capaz, muy profesional y muy serio. Yo tengo mucha confianza en lo que ellos están haciendo. Hay que dejar que hagan su trabajo que es reducir la inflación, cuidar el empleo y buscar la forma de cómo puedan generar más valor para el crecimiento del país.
Hablando de tasas, paso al tema bancario, ¿los neobancos le restan mercado a la banca tradicional?
El neobanco es una nueva concepción muy orientada a las nuevas tecnologías. Ese mundo también ha tenido muchas dificultades por la coyuntura que dije anteriormente. Uno tiene que acostumbrarse a la competencia y pensar que la competencia es buena porque lo obliga a uno a estar muy al día en esas tecnologías y en esas innovaciones que puedan aparecer en los negocios en los que uno está.
Diría que los neobancos son una nueva orientación que expande el mercado, no es que el mercado sea el mismo y que hay que repartirlo entre más actores. No. Hay una expansión en el mercado y hay unas posibilidades que yo creo que van a ser buenas para toda la sociedad.
¿Desaparecerá la oficina bancaria en su formato físico?
No. Esa no va a desaparecer, va a continuar por mucho tiempo y van a existir los dos formatos, las diferentes posibilidades.
Volviendo al estado de la economía, ¿se ha visto afectado el clima inversionista?
Sí, definitivamente se ha visto afectado el clima inversionista. Pero quisiera destacar que no se le puede echar toda la culpa al Gobierno, pues porque son muchos los problemas. Está el problema de la seguridad, la inflación, los altos intereses y pues, obviamente, está el tema del papel que está jugando el Gobierno. Yo sí creo que el entusiasmo inversionista ha disminuido.
¿Pero Colombia sigue siendo buen mercado para invertir?
A más largo plazo, sí. El inversionista en general está tomando decisiones según la pauta, para ver cómo se solucionan todos los problemas. Yo sí creo que en cuatro o cinco años vamos a tener un país otra vez pujante, creciente, etcétera.
¿Cómo afecta la inversión la baja en la perspectiva de calificación de S&P Global?
Nos hace daño un poquito, porque hay inversionistas sumamente grandes, pero que a su vez recogen los recursos de muchos ahorradores, de muchos inversionistas pequeños. Entonces, ellos tienen que ser muy cuidadosos con la forma en la que invierten. Y si las calificadoras dicen: cuidado con Colombia versus tenga cuidado con un mercado como Chile, entonces prefieren a Chile. En este momento, Latinoamérica no presenta un interés en general para los inversionistas por todo lo que he dicho.
¿Y por la situación política también?
Sí, también. Argentina es un caso que se está mirando con cuidado. Los inversionistas, por ejemplo, no van a tomar la decisión de entrar a Argentina porque vienen de una situación de inflación muy grave. Y con Venezuela también pasa lo mismo.
¿Y Colombia? ¿Dejó de ser la bonita del paseo?
Exactamente.
Usted habló de empleo, ¿cómo hacer para crear más empleo en Colombia?
Creo que lo que hay que buscar es la reacción nacional a lo que llamo “aumentar valor”.
¿Y qué es aumentar valor?
Es crear empresa, es ampliar el espectro de las empresas. Si hacemos eso, vamos a necesitar más personas y eso genera más empleo. Tenemos algunos temas que son complicados, porque las nuevas tecnologías reducen el empleo, entonces ahí hay dos factores que se están enfrentando, pero yo creo en la posibilidad de seguir creando empleo.
¿Cómo proyecta al Grupo Bolívar a cinco años?
Lo veo creciendo de una forma sana, porque hay factores que se van a arreglar: la inflación, los altos intereses, y la capacidad de nuestros consumidores de atender sus obligaciones.