¿Qué puede salir mal en una ronda de inversión? Los mitos y realidades de este proceso
viernes, 10 de febrero de 2023
Valoraciones irreales y falta de conocimiento de los propietarios de la compañía, son algunos de los errores más frecuentes al momento de levantar capital
Colombia es el segundo país de Latinoamérica con mayor captación de capital después de Brasil, presentando las mejores condiciones para el emprendimiento en la región, lo que motiva a muchos a levantar rondas de inversión, teniendo en cuenta lo atractivo que se ha vuelto el país en esta materia.
Esto se explica, también, porque aunque a nivel regional la inversión cayó 54%, las startups colombianas han atraído la mayor cantidad de venture capital de su historia el primer semestre de 2022, con US$1.030 millones. Es decir, ha habido un aumento de 63% en operaciones y de 29% en capital levantado, de acuerdo con cifras de Transactional Track Record.
Sobre esto, Esteban Urrea, CEO de Vertical Partners, fondo de inversión de riesgo del grupo empresarial Leonisa, asegura que “antes de buscar inversión, las startups deben analizar si realmente necesitan capital para escalar rápido y obtener participación de mercado. A su vez, verificar que se encuentran en un mercado lo suficientemente grande, con una oportunidad de negocio material y, por último, entender cómo funcionan los fondos de venture capital, estar de acuerdo con sus principios y con el crecimiento que estos esperan”.
Aún con estos resultados, es clave tener claro cuáles pueden ser los errores más comunes al momento de levantar una ronda de inversión; por ello, Urrea comparte algunos puntos que pueden tenerse en cuenta.
En ocasiones, tiene que ver con la carencia de conocimiento, como el no saber los números y métricas relevantes, no tener claridad sobre la destinación que se les dará a los recursos obtenidos y no tener claro el modelo de monetización, asumiendo que, en el futuro, el ingreso será por datos o publicidad.
Otros de los errores frecuentes son tener valoraciones altas o bajas que no concuerden con el modelo de negocio, contar con un rango muy amplio de lo que están levantando, o estar en ronda de inversión por más de seis meses, y tener un inversionista estratégico con una participación alta en una etapa temprana. O que el equipo emprendedor esté muy diluido.
En cuanto a los ingresos o el dinero que se mueve en la empresa, también hay errores a evitar, como: no estar 100% comprometidos con la empresa, tener vida de caja de menos de seis meses, tener un mercado objetivo potencial de menos de US$1.000 millones, no ser abiertos a compartir información e indicar que no tienen competencia.
Así mismo, Urrea menciona que identificar los mitos y verdades que existen en torno a las rondas de inversión es necesario para comprender sus dinámicas y lograr una correcta ejecución.
De acuerdo con Urrea, decir que todas las valoraciones son infladas y no sustentadas es un mito, ya que la mayoría se sustentan con factores como ventas, producto, mercado, tecnología, entre otras. Otro, es creer que todas las startups deben tener más de un fundador, dado que pueden tener uno y aun así levantar una ronda de inversión.
Si una startup no logra levantar capital, no significa que su producto sea poco atractivo necesariamente. Este es otro mito que puede sorprender un poco, pues según Urrea, un buen producto en el mercado correcto y con la visión clara, siempre logrará levantar financiación.
En cuanto a las verdades del proceso, una de ellas es que los recursos no solo se deben conseguir en Colombia, ya que es necesario buscar inversión de fondos ubicados en otros países. Otro aspecto es evitar conseguir un “mal inversionista”, y para ello las startups deben ser muy cuidadosas al elegirlos, revisando que cuenten con el conocimiento necesario y no tengan riesgos reputacionales que causen crisis o interfieran en el crecimiento de la empresa.
Ante esto, Diego Palencia , VP de investigación en Solidus Capital, asegura que las compañías, “deben pasar de evaluar en función de rentabilidad, a presentar modelos viables y sostenibles en periodos de riesgo e incertidumbre”.