Abdicación del Rey Juan Carlos no afectará la agenda con Colombia
martes, 3 de junio de 2014
Colprensa
El monarca español, de 76 años de edad, a lo largo de sus cuatro décadas en el trono “se encargó de consolidar las relaciones bilaterales con todos los países de habla hispana, al punto de que se convirtió en un referente diplomático que excedió los interese de cada Gobierno que ha tenido España desde entonces”, consideró el analista internacional Vicente Torrijos.
Y su hijo, el príncipe de Asturias ha seguido por la misma senda. En el caso colombiano, el sucesor del trono ha venido a la posesión de los tres últimos presidentes colombianos, y a la mayoría de los latinoamericanos de los últimos lustros.
Eso, dice Torrijos, le da un mayor conocimiento de todo el continente “y es un presagio de que con el heredero al frente de la corona habrá continuidad en las buenas relaciones que han tenido particularmente España y Colombia en los últimos años”, destaca el experto.
De hecho, hace pocos meses el presidente colombiano Juan Manuel Santos se reunió con Su Majestad Don Juan Carlos en el Palacio de la Zarzuela, en Madrid, donde el soberano español le brindó su respaldo al proceso de paz que se desarrolla en La Habana.
Incluso, fue el propio jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, quien lideró el desmonte de la visa Schengen para Colombia y Perú, proceso que debe estar culminado dentro de un año.
“Lo que vemos es que con España vamos a tener un fortalecimiento de los vínculos comerciales y políticos, no importa el cambio que hubo en la Monarquía, y mucho menos el posible cambio de presidente que se pueda dar en Colombia”, agregó el internacionalista.
Torrijos explicó que en los regímenes monárquicos, como el caso español, quien esté en el trono tiene su propia agenda diplomática externa y de temas de seguridad nacional, porque el presidente del Gobierno o el primer ministro están supeditados a las mayorías parlamentarias.
Es decir, “el jefe de la monarquía es el que impulsa las políticas de Estado para evitar que estas estén al vaivén de los cambios de Gobierno, pero esa agenda siempre está muy bien articulada con la del Gobierno. O sea, el monarca es el jefe de las relaciones exteriores, es el jefe del Estado y de los asuntos de defesa nacional. El Presidente es el jefe administrativo del Gobierno”, concluye Vicente Torrijos.