Aerolínea Iberia invertirá US$6.908 millones hasta 2030 y 70% se destinará a su flota
miércoles, 18 de junio de 2025
La compañía aspira a crecer de los 45, actualmente tiene 70 unidades para que Barajas este a la altura de los grandes aeropuertos europeos"
Expansión - Madrid
La compañía espera aumentar en 25 aviones su flota de largo radio, ampliará destinos con América, contratará a mil personas cada año y construirá una nueva sede en La Muñoza
Más aviones, rutas con más ciudades y un desarrollo de actividades como la carga, el handling y el mantenimiento para hacer de Barajas un aeropuerto europeo "líder", capaz de competir con los grandes hubs del continente. Estos son los principales objetivos que se ha marcado Iberia en su Plan de Vuelo 2030, que prevé una inversión de US$6.908 millones en los próximos años y mantener su rentabilidad entre 13,5% y 15%.
El grueso de la inversión se ejecutará hasta 2030, aunque previsiblemente se prolongará durante los dos o tres primeros años de la próxima década, algo que dependerá de cuándo reciba los aviones previstos, ya que 70% del total se destinará a flota (ampliación y, en menor medida, renovación).
La compañía aspira a crecer de los 45 aviones de largo radio que tiene actualmente a las 70 unidades "para contribuir a que Barajas se convierta en un gran hub a la altura de los grandes aeropuertos europeos", ha afirmado su presidente, Marco Sansavini, en la presentación, esta mañana, en el Espacio Iberia, en el centro de Madrid.
En concreto, la aerolínea tiene garantizadas 14 unidades (9 Airbus A350 y 5 A321-XLR) y espera recibir otras once. "Dependerá de que cumplamos objetivos financieros y económicos y de la paz social", ha dicho Sansavini. Una de las novedades será que Iberia pretende comenzar a incorporar algunos de los nuevos aviones sin financiación, con el objetivo de reducir la deuda no financiera (tiene posición neta de caja).
A ello habrá que añadir cuatro aviones más para el corto radio entre 2026 y 2027 para incentivar las conexiones que alimentan el aeropuerto de Madrid. Iberia mantiene abierto un conflicto con Iberia Express, la filial que, junto con su franquiciada, Air Nostrum, se encarga de los vuelos de corto y medio radio que nutren las rutas de largo radio de Barajas. Sin un acuerdo sindical, Iberia no piensa impulsar la capacidad de su filial. "El crecimiento está garantizado, pero tenemos que ver cómo", ha afirmado Sansavini.
Este aumento de capacidad no guarda relación con el tamaño que habría alcanzado Iberia de haberse cerrado la fracasada compra de Air Europa, sino que obedece a las posibilidades de crecimiento que la filial de IAG considera que tiene en los mercados donde opera. Iberia espera un incremento anual de su actividad de entre 3% y 5%, aunque en su región clave, la latinoamericana, el alza podría situarse por encima de 5%. Iberia considera que Latinoamérica presenta más posibilidades que otras geografías más asentadas.
Nuevas rutas con Norteamérica
Entre los nuevos destinos en sus rutas de largo radio, entre Madrid y América, destacarán Toronto (Canadá), Filadelfia (EEUU) y Monterrey (México), que se suman a las recientemente anunciadas de Recife y Fortaleza (Brasil) y Orlando (EEUU). En cambio, Iberia renuncia por ahora ampliar sus rutas con Asia y África, la gran asignatura pendiente de Madrid. El grupo está centrado en desarrollar los mercados donde cree que tiene más potencial y tiene una ventaja competitiva, que es el continente americano, donde ahora tiene una cuota de 17% en las conexiones Europa-Latinoamérica y 25% en el corredor entre España y EEUU.
Sansavini ha dicho que el plan de crecimiento estará coordinado con la ampliación de Barajas, a la que Aena, el gestor aeroportuario, destinará US$2.761 millones en los próximos años.
Iberia prevé renovar todas las cabinas de largo radio e inaugurará una nueva sala prémium adicional en la T4 de Barajas. A las dos que tiene en la T4 y en la Satélite se añadirá una tercera en la propia T4.
Cambio de la sede
La compañía construirá la Ciudad Iberia, en La Muñoza, junto al aeropuerto de Madrid, un espacio de innovación aeronáutica, donde también trasladará su sede. Esto supondrá una inversión de US$690 millones: US$230 millones, al menos, de la propia Iberia, además de otros US$460 millones de socios con los que trabaja. Aunque no hay plazos cerrados, la compañía ya ha comenzado con los trámites administrativos y le gustaría tenerla a punto en 2027, coincidiendo con su centenario.
Desde el punto de vista del empleo, Iberia prevé contratar a un millar de personas cada año (actualmente tiene 18.000 trabajadores). La aerolínea pretende desarrollar otros negocios complementarios, como son el de handling, con South, la filial que controla a 100%, así como los de mantenimiento y reparaciones, con compañías terceras (que no sean filiales de IAG) y con nuevas licencias.
Preguntado sobre el papel de Iberia en El Prat, donde Aena planea una inversión de US$3.680 millones en los próximos años para prolongar una pista y construir una terminal Satélite para reforzar el papel de Barcelona en los vuelos intercontinentales, el primer ejecutivo de Iberia ha afirmado que la enseña no tiene previsto operar allí vuelos de este tipo, y que el potencial le correspondería exprimirlo a Level, la filial de IAG de vuelos de largo radio y bajo coste con sede en Barcelona, en colaboración con Vueling para vuelos de corto y medio radio. También ha afirmado que prevé mantener el Puente Aéreo sin cambios.
Iberia facturó el año pasado US$9.012 millones, 10% más que en 2023, y ganó US$862 millones, 25% menos, como consecuencia, sobre todo, del coste de US$183 millones que tuvo la reestructuración de su negocio del handling.