American Airlines, BQB y Delta Airlines enfrentan problemas en América Latina
lunes, 22 de septiembre de 2014
Fermina Salaverría
El tránsito aéreo desde y hacia la Región se complica cada vez más para los pasajeros. Estos problemas suponen unos costos económicos significativos para las aerolíneas y los consumidores.
El anuncio reciente de American Airlines en Argentina, restringiendo a un máximo de 90 días el plazo en que las personas pueden comprar sus boletos, es una consecuencia directa de las políticas del país. El miedo a la depreciación del peso argentino y la diferencia que existe entre la tasa de cambio oficial ($8,40 pesos argentinos por US$1) y la informal ($15 pesos argentinos por US$1) son algunos de los factores que han llevado a la aerolínea estadounidense a tomar estas medidas frente al país suramericano.
LR habló con los voceros de American Airlines para Latinoamérica y la empresa dijo que aún no tiene una posición frente a este caso.
Claudia Velásquez, consultora aeronáutica, comentó que “American Airlines está mandando un mensaje muy claro para el gobierno de Cristina Fernández de cómo se perciben las decisiones que afectan los ingresos estimados dentro de un mercado determinado”.
Por su parte, en Venezuela, Delta Airlines manifestó que ya le pagó a 90% de sus clientes, cuyos vuelos fueron cancelados. Esta suma asciende a US$ 39 millones. Delta es una de las muchas aerolíneas que huyeron de este país debido a la deuda del gobierno de Nicolás Maduro con las empresas aéreas, que suma US$4.100 millones, debido al cambio de los bolívares que deben hacer al valor de la tasa oficial controlada por el Estado.
Jairo Fierro, abogado de derecho aeronáutico, explicó que compañías aéreas están entre las primeras empresas privadas en reaccionar ante condiciones políticas o económicas desfavorables.
“El transporte aéreo es clave para conectar los países. En esencia, se trata de una exportación e importación de divisas. Estas empresas aportan y representan grandes ingresos para el Producto Interno Bruto (PIB) de cada país y tienen una voz y responsabilidad respecto a esto”, expresó.
Además, el paro de pilotos de la aerolínea Air France, que comenzó el lunes pasado, ha causado que la compañía cancele 60% de los vuelos en su operación global.
Según cifras de la empresa, cada jornada de huelga implica pérdidas de entre US$12,9 millones y US$19 millones.
Respecto a Colombia, el gerente general de Opaín S.A., Andrés Ortega, dijo que todavía no ha habido consecuencias en los vuelos operados por la francesa desde y hacia Eldorado.
Como si esto fuera poco, en Brasil también se han presentado obstáculos con las operaciones de las aerolíneas. La compañía de transporte BQB, basada en Montevideo, ha suspendido sus frecuencias hacia Brasil, cuyas rutas volaban a los aeropuertos de Porto Alegre, Curitiba y São Paulo. La razón detrás de esto es que la firma no pagó su suscripción anual a la International Air Transport Association (Iata), por lo que perdió su derecho de vender tiquetes.
Efectos políticos sobre las aerolíneas internacionales
Alberto Maya, analista de aviación comercial, explicó que como todas las empresas privadas, las aerolíneas no están dispuestas a prestar un servicio en un destino que no les es rentable. Por ejemplo, si la seguridad jurídica y las condiciones económicas no son viables, y además el contexto político es inquietante, las empresas aéreas optarán por salirse de ese mercado. En Argentina, las aerolíneas tomarán decisiones teniendo en cuenta que haya un flujo de caja constante para poder solventar sus gastos operacionales.
Las Opiniones
Jairo Fierro
Especialista en derecho aeronáutico y espacial
“Las aerolíneas son de las empresas privadas que reaccionan rápidamente ante condiciones económicas y políticas desfavorables porque representan ingresos enormes para el PIB”.
Andrés Ortega
Gerente general de Opaín S.A.
“En el Aeropuerto Eldorado, todavía no ha habido consecuencias en las frecuencias y operaciones de vuelos por las huelgas de los sindicatos de la compañía Air France”.