China, Canadá y México, principales afectados con alza de aranceles de Donald Trump
miércoles, 27 de noviembre de 2024
El peso mexicano y el dólar canadiense cayeron con los anuncios de los aumentos arancelarios; pero estas medidas no afectarían el intercambio comercial de Colombia
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció las intenciones de implementar nuevos aranceles a productos provenientes de México, Canadá y China, los primeros asumirían un tributo de 25% y el país asiático de 10%.
La imposición de estos impuestos se alinea con la premisa proteccionista de la economía estadounidense mientras, de acuerdo con el próximo jefe de Estado de EE.UU., se da una solución al problema migratorio y al consumo de drogas, particularmente del fentanilo.
“Las drogas están llegando a nuestro país, principalmente a través de México. Hasta que dejen de hacerlo, le cobraremos a China un arancel adicional de 10%, además de cualquier arancel adicional, sobre productos que ingresan a EE.UU.”, expresó Donald Trump.
La decisión del presidente electo se entiende como otro intento por ejercer un nuevo orden arancelario. En campaña, ya había prometido aumentar los aranceles hasta 60% a los bienes importados de China y 20% para los del resto del mundo.
Camilo Pérez, director de investigaciones económicas del Banco de Bogotá explica que esta medida podrían desestabilizar el comercio mundial en el mediano plazo. “Los anuncios proteccionistas afectarían el desempeño económico. Generarán fricciones en el comercio internacional e incertidumbre en los mercados”, dijo Pérez.
Colombia no se perjudicará
Con estos tres países como los principales afectados por la medida, cabe revisar como incidirá la implementación de aranceles en países con los que la Unión Americana tiene un intercambio comercial activo. Siendo uno de ellos Colombia, el grupo de investigaciones económicas del Banco de Bogotá estima que no tendrá un gran impacto para las relaciones binacionales.
“El efecto directo de las posibles medidas arancelarias en el comercio entre Estados Unidos y Colombia sería mínimo (o casi nulo), dada la poca relevancia que tiene el país en las importaciones de Estados Unidos”, resalta la entidad.
Según el grupo investigador, el país no representaría un riesgo para la producción norteamericana en razón de la baja representación de las exportaciones hacia Estados Unidos. En 2023, la nación exportó US$13.000 millones a un mercado que, en el mismo año, contabilizó US$3 billones. El peso de Colombia para las exportaciones de EE.UU. fue de 0,4% en dicho periodo.
En cuanto a las exportaciones de Colombia, a excepción del oro y el petróleo, ninguno de los otros productos que llegan a Estados Unidos se producen en ese territorio, por lo que no tendría un impacto visible.
“De hecho, en el caso del petróleo y el oro (incluso café y frutas), al tratarse de materias primas, las políticas arancelarias no suelen afectarlas y de implementarse solo redireccionarían el comercio hacia otro país”, agrega el grupo de Investigaciones Económicas del banco. Aunque, nuevamente, ante la baja representación del país en las importaciones de Estados Unidos, el impacto en el flujo de dólares sería limitado en tanto que solo significa 5% de las ventas a la Unión Americana y 1,4% del total de las exportaciones de Colombia.
Una política de Trump que le apunte a una mayor exploración y explotación de petróleo sí desbalancearía las relaciones entre ambos países.Al ser la mayor fuente de exportaciones de Colombia, una propuesta de EE.UU. en este sentido reduciría su necesidad de importar crudo de otros países. En 2023, desde Colombia totalizaron US$6.038 millones.
Europa también reacciona ante el anuncio
Las bolsas europeas cayeron el martes, lastradas por las acciones de las automotrices, ya que la amenaza de aranceles del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, a los mayores socios comerciales del país provocó preocupaciones sobre otra guerra comercial mundial.
El paneuropeo Stoxx 600 bajó 0,5%, rompiendo una racha de tres días de ganancias, en medio de la preocupación por que los aranceles puedan reactivar la inflación mundial y pesar sobre la flexibilización de la política monetaria también, empañando el estado de ánimo de los inversionistas.