Argentina pasó de ser la gran promesa a la oveja negra de la región
miércoles, 5 de septiembre de 2018
Mercados del vecindario en los últimos meses han visto un fuerte éxodo de capitales extranjeros de sus economías
Diario Financiero - Santiago
La crisis argentina ya tiene un fuerte impacto en las economías de los mercados emergentes. Los países de la región vieron en los últimos meses un fuerte éxodo de capitales extranjeros de sus economías, que según la banca internacional, se debe principalmente a la incertidumbre política y económica en el Gobierno de Mauricio Macri.
El Instituto de Finanzas Internacionales ( IIF por según sus siglas en ingles), un organismo que nuclea a los principales bancos y entidades financieras del mundo, viene siguiendo desde hace varios meses la relación que la fragilidad de la economía local tiene para sus pares regionales. En su último reporte, analizó el impacto de la escalada de la turbulencia en el país en los flujos emergentes. "La escalada de la crisis monetaria de Turquía y la agitación en Argentina han sacudido a otros mercados emergentes en las últimas semanas", aseguró el informe.
A nivel global, el organismo con sede en Washington marcó un crecimiento de los capitales extranjeros hacia las naciones emergentes, pero que sólo se explica por un rebalanceo de cartera de los inversores globales hacia China. En América Latina, el fenómeno fue inverso: salieron entre US$ 3.100 y US$ 3.200 millones sólo en agosto. Entre las razones de esta emigración masiva, el IIF pone en primer lugar la crisis actual de Argentina, en segundo puesto la incertidumbre política en Brasil en un contexto electoral y por último, las preocupaciones que generan las tensiones entre Estados Unidos y el Gigante Asiático.
De hecho, según puntualiza el estudio, julio fue en general un mes de leve recuperación para los emergentes. Para casi todos: Argentina, junto a Colombia y Filipinas fueron los únicos tres países con déficit de cuenta corriente que vieron salidas netas de divisas extranjeras en el séptimo mes del año. "En particular, Argentina vio una fuerte reducción de más de US$ 13 mil millones de entradas en junio a salidas de más de US$ 12 mil millones en julio", remarcó el estudio. Una buena foto para explicar en parte la corrida de la última semana.
Las crecientes dudas sobre las hacerle frente a la crisis del país se suman a la suba de tasas de interés de la Reserva Federal, que mutan la atención de los inversores hacia la economía estadounidense. "Un efecto secundario de este apetito reducido ha sido una desaceleración en la emisión de bonos denominados en divisas: junio y agosto han sido los dos meses más débiles de emisión desde la crisis de 2015 con alrededor de US$ 7 mil millones emitidos en cada mes en comparación con un promedio mensual de US$27 mil millones en los últimos dos años".
En una entrega anterior, el IIF había alertado, hace menos de un mes, que en países como Argentina y Brasil podrán verse aumentos del nivel de endeudamiento externo "desde niveles iniciales ya altos y había advertido, que junto con Ucrania, es el único país donde la deuda en divisas supera al 70% del PBI.