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Guatemaltecos votan por nuevo presidente, muchos esperan renovación democrática

Elecciones en Guatemala

Elecciones presidenciales en Guatemala, se desarrollan sin altercados al orden público y ante la vigilancia de 86 observadores internacionales

Reuters

Los guatemaltecos acudían a las urnas el domingo para votar en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales que muchos esperan revierta el retroceso democrático bajo las últimas administraciones.

Encuestas recientes han pronosticado que Bernardo Arévalo, un candidato progresista que se postula con un mensaje anticorrupción, derrotará a la figura del poder establecido y exprimera dama Sandra Torres. Ese resultado podría marcar el comienzo de una nueva era después de las acusaciones generalizadas de corrupción y autoritarismo progresivo en los últimos años.

El nuevo presidente de Guatemala asumirá el poder mientras la violencia y la inseguridad alimentaria azotan al país, provocando nuevas oleadas de migración. Los guatemaltecos ahora representan el mayor número de centroamericanos que buscan ingresar a Estados Unidos.

La elección está siendo observada de cerca por la comunidad internacional, incluido Estados Unidos, después de que la campaña se vio empañada por los intentos de algunos funcionarios de sacar a Arévalo y a su partido, Movimiento Semilla, de la contienda.

Su sorpresivo segundo puesto en la primera vuelta electoral de junio provocó llamados de los opositores a recuentos que retrasaron los resultados oficiales. Su partido fue suspendido brevemente a pedido de un fiscal antes de que el tribunal supremo del país revocara la prohibición.

El tira y afloja político ha puesto nerviosos a algunos votantes sobre posibles problemas durante el balotaje, que Arévalo ha dicho públicamente que espera.

"Espero que sea todo tranquilo, que gane la democracia, que no haya fraude o cuestiones de los políticos (...) y que nuestro país salga adelante más que todo", dijo Ardem Villagran, un comerciante de 58 años de edad, en Ciudad de Guatemala.

El presidente saliente, Alejandro Giammattei, prometió garantizar una votación ordenada y una transición del poder.

Pero muchos guatemaltecos siguen escépticos, ya que en los últimos años el Gobierno expulsó a investigadores de una misión anticorrupción respaldada por la ONU y atacó a jueces y activistas anticorrupción, muchos de los cuales se exiliaron.

El fiscal general que pidió la suspensión de Semilla había sido agregado previamente por el Departamento de Estado estadounidense a su llamada Lista Engel de "actores corruptos y antidemocráticos".

La Organización de Estados Americanos (OEA) dijo que un equipo de 86 observadores electorales estaba en el país.

"Es fundamental que la ciudadanía se pueda expresar libremente con plenas garantías y que su voluntad expresada sea respetada", dijo el sábado Eladio Loizaga, jefe de la misión de la OEA en Guatemala.

Las urnas cerrarán a las 18.00 hora local (0000 GMT del lunes).

El presidente electo debería asumir el cargo el 14 de enero, aunque los expertos advirtieron que los meses posteriores a la votación los resultados podrían verse cuestionados.

El director de políticas e iniciativas estratégicas de la Fundación Internacional de Seattle, Eric Olson, que se enfoca en América Central, dijo que la OEA y Estados Unidos ven eso como un riesgo.

"Es mucho tiempo para que haya intentos no sólo de cuestionar los resultados, sino también la legalidad del partido ganador", agregó el experto.

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