Axel Kicillof triunfó en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires

El opositor partido peronista de Argentina triunfó el domingo en las elecciones legislativas de la poderosa provincia de Buenos Aires, dejando al partido del Gobierno central en un lejano segundo lugar, de acuerdo al escrutinio oficial provisorio.

Así, el gobernador de centroizquierda Axel Kicillof logró doblegar la estrategia nacionalizada que instrumentó el presidente libertario Javier Milei, quien pese a la derrota se ilusiona con los comicios nacionales de medio término programados para fin de octubre.

En base a cómputos provisorios con 93,21% de los votos, el peronismo alcanzaba 47,12% en toda la provincia con el frente 'Fuerza Patria', contra 33,80% de la oficialista 'La Libertad Avanza'.

La diferencia resultó mucha más amplia que las previsiones de encuestas privadas en una provincia como bastión histórico del peronismo y que reúne 40% del total de los votantes nacionales.

Milei reconoció la derrota y redobló objetivos.

"De cara al futuro vamos a corregir todos nuestros errores", sostuvo Milei ante sus seguidores. "El rumbo por el cual fuimos elegidos en el año 2023 no se va a modificar, sino que se va a redoblar".

"Vamos a seguir defendiendo con uñas y dientes el equilibrio fiscal (...) No se retrocede ni un milímetro. El rumbo no solo que se confirma sino que lo vamos a acelerar y profundizar más", enfatizó a modo de dar tranquilidad a los mercados previo al inicio de las operaciones semanales.

La plaza financiera viene de fuertes sacudones pendientes del resultado de los comicios y de denuncias de corrupción dentro del Gobierno, en medio de una caída de la imagen pública de un disruptivo Milei y crecientes tensiones sociales por los efectos de su duro plan de ajuste de la economía.

"Había un caldo de cultivo que terminó de cuajar en las últimas semanas" por las denuncias que involucraron al Gobierno nacional, dijo la analista política Lara Goyburu.

Si bien se trató de una elección para el Parlamento de la provincia comandada por Kicillof, su resultado marca el tono para los comicios de medio término de 26 de octubre en todo el país, en las que el oficialismo buscará revertir la minoría actual en ambas cámaras del Congreso.

Alrededor de 14 millones de los tildados 'bonaerenses' eligieron este domingo 46 diputados y 23 senadores provinciales, divididos en ocho secciones.

Analistas coincidieron en que se trató de un punto de inflexión para ambos líderes, Milei y Kicillof, dada la compleja coyuntura en la tercera economía de Latinoamérica.

Medio término

"Aunque sea una elección provincial, es sin duda el verdadero trampolín para los comicios nacionales de octubre, ya que miden fuerzas en el mayor distrito del país. Interpretamos que de este resultado en Buenos Aires habrá una gran interacción para elegir diputados y senadores (nacionales) el mes que viene", dijo el analista político Guillermo Farina.

Kicillof es un exministro de Economía de la expresidenta Cristina Fernández, actualmente en prisión domiciliaria por fraude al Estado y desde donde distribuyó un audio celebrando el resultado en las urnas.

El sostenido enfrentamiento conceptual entre el libertario Milei y Kicillof puso a estos comicios en el ojo de atención política y financiera, ya que el resultado producirá indefectiblemente definiciones en ambos partidos.

"Fue una victoria aplastante (...) esto es una fiesta popular ante mucha gente que la está pasando muy mal (en lo económico). Esta es una alegría reparadora, dijimos que le veníamos a poner freno a las políticas de Milei y acá estamos", festejó Kicillof ante entusiastas seguidores.

"Nos jugamos todos (...) En las urnas se expresa una vocación, un futuro que se desea", dijo previamente a periodistas, por lo que se debe "escuchar (el resultado de) las urnas".

Milei pugna por un camino con estricto control del equilibrio fiscal y dominio de la inflación, mientras que Kicillof apunta a una expansión del gasto público para dinamizar la economía.

Desde que asumió en diciembre de 2023, Milei ha reducido el rol del Estado, con un drástico recorte de la obra pública y de ingresos para sectores sensibles como la salud, la educación, la ciencia y los jubilados, además de otros servicios sociales, lo que podría costar caro a su popularidad.

Alejandro Catterberg, analista político, subrayó que "al Gobierno (nacional) se le fragmentó el voto" con el resultado provincial.

Las elecciones en Buenos Aires se celebraron por primera vez desdobladas de las nacionales y se realizaron tras arduas negociaciones dentro de los diferentes frentes con la idea de consolidar el poder.