BCE promete diseñar una nueva herramienta para apoyar a los miembros endeudados
miércoles, 15 de junio de 2022
Los rendimientos de la deuda pública se han disparado en la periferia del bloque desde que el BCE anunció subidas de tasas
Reuters
El Banco Central Europeo (BCE) presentó el miércoles nuevas medidas para moderar la caída de los mercados, que ha avivado el temor a una nueva crisis de la deuda en la periferia sur del bloque, pero pareció decepcionar a algunos inversores que esperaban un paso más decisivo.
Los rendimientos de la deuda pública se han disparado en la periferia del bloque monetario de 19 países desde que el BCE desveló el jueves pasado sus planes de subir las tasas de interés en julio y septiembre para controlar una inflación dolorosamente alta que corre el riesgo de afianzarse.
La liquidación se vio exacerbada por la ausencia de un plan concreto del BCE para limitar la subida de los costos de endeudamiento, lo que hizo temer que las autoridades de política fueran demasiado complacientes con la situación de las naciones más endeudadas, como Italia, España y Grecia.
Ante la amenaza de que se repita la crisis de deuda que estuvo a punto de hacer caer la moneda única hace una década, el BCE dijo que será flexible a la hora de reinvertir el efectivo que vence de su plan de apoyo a la pandemia por US$1,8 billones, que finalizó recientemente, y que considerará un nuevo instrumento que deberá ser ideado por su personal.
"El Consejo de Gobierno decidió encargar a los comités pertinentes del Eurosistema, junto con los servicios del BCE, que aceleren la finalización del diseño de un nuevo instrumento antifragmentación para su consideración por el Consejo de Gobierno", declaró el BCE tras una reunión extraordinaria.
Los inversores se mostraron poco satisfechos, ya que esperaban pasos más decisivos y más detalles.
El euro cayó cerca de medio punto frente al dólar tras la declaración del BCE, mientras que el rendimiento de los bonos italianos se disparó unos 7 puntos básicos.
El diferencial entre los bonos italianos y alemanes a 10 años, un indicador clave, se amplió a 239 puntos básicos desde los 224 anteriores al anuncio.
"Esto es lo que deberían haber dicho la semana pasada. Más vale una semana tarde que nunca", dijo Frederik Ducrozet, de Pictet Wealth Management. "Los detalles importarán mucho, pero ahora no veo cómo podrían no cumplir para la próxima reunión".
Los diferenciales italianos alcanzaron un máximo de unos 250 puntos básicos el martes, su nivel más alto desde principios de 2014, lo que aumenta la preocupación de que el alto nivel de deuda de Italia pueda llegar a ser insostenible.
Aunque no hay un nivel universalmente aceptado para este diferencial, Carlo Messina, presidente ejecutivo de Intesa, el mayor banco de Italia, dijo con anterioridad el miércoles que los fundamentos económicos del país justificarían entre 100 y 150 puntos básicos.
Por su parte, el diferencial de los bonos españoles a 10 años se amplió a 128 puntos básicos tras el anuncio del BCE, frente a los 125 previos, mientras que en el caso de Grecia subió de 260 a 269 puntos básicos.