Británico acepta cargo por hackear cuentas en Twitter a líderes empresarios y políticos

Un hombre británico admitió su participación en uno de los hacks de redes sociales de más alto perfil, un complot que incluyó el secuestro de las cuentas de Twitter de los principales líderes políticos y empresariales de EE. UU.

Joseph James O'Connor se declaró culpable en Nueva York el martes de piratear la red social, un movimiento que condujo a la suplantación de Barack Obama, Joe Biden, Jeff Bezos, Warren Buffett y otros para publicitar un esquema de Bitcoin.

El joven de 23 años, también conocido como “PlugwalkJoe”, fue extraditado de España el 26 de abril, según el Departamento de Justicia. Los delitos involucraron intercambios de SIM, un proceso en el que un número de teléfono se transfiere a un nuevo dispositivo para eludir las medidas de seguridad, pero fueron mucho más allá, dijeron los fiscales.

“O'Connor usó sus habilidades tecnológicas sofisticadas con fines maliciosos: realizó un complejo ataque de intercambio de SIM para robar grandes cantidades de criptomonedas, pirateó Twitter, realizó intrusiones informáticas para apoderarse de las cuentas de las redes sociales e incluso acosó cibernéticamente a dos víctimas, incluido un menor. dijo el Fiscal Federal Damian Williams para el Distrito Sur de Nueva York.

“La declaración de culpabilidad de O'Connor hoy es un testimonio de la importancia de la cooperación policial, y agradezco a nuestros socios policiales por ayudar a llevar ante la justicia a quienes victimizan a otros a través de ataques cibernéticos”, dijo.

El Departamento de Justicia alega que O'Connor conspiró con otros para secuestrar cuentas de Twitter para promover un esquema para defraudar al público, con O'Connor pagando $10,000 por solo una de las cuentas que solicitó. Los co-conspiradores utilizaron técnicas de ingeniería social para convencer a un empleado de Twitter de que les diera acceso a las herramientas administrativas de la plataforma. Esas herramientas se utilizaron para tomar el control de las cuentas de alto perfil.

Según la hoja de cargos, O'Connor se declaró culpable de una variedad de delitos cibernéticos, incluida la explotación de cuentas de redes sociales, extorsión en línea y acoso cibernético.

En un caso, realizó un intercambio de SIM para ingresar a la cuenta de Snapchat de una víctima y compartir las imágenes de la persona con sus cómplices. Realizó un hackeo similar en agosto de 2020, usó el intercambio de SIM nuevamente para hacerse cargo de una cuenta TikTok de alto perfil y amenazó con publicar información personal sobre la víctima en el sitio de chat de Discord.

O'Connor también se declaró culpable de "golpear" a un menor en junio y julio de 2020, lo que implicó llamar a los departamentos de policía locales y hacerse pasar por la víctima, alegando que planeaban matar a varias personas. En respuesta, todos los oficiales de servicio en el área fueron enviados a la casa de la víctima. O'Connor también envió mensajes similares a una escuela secundaria, un restaurante y el departamento del alguacil. Al mes siguiente llamó a la familia de la víctima en múltiples ocasiones y los amenazó de muerte.

Además, O'Connor se declaró culpable de robar $ 794,012.64 de una empresa de criptomonedas con sede en Manhattan mediante el intercambio de SIM de algunos de sus ejecutivos.

Está programado para ser sentenciado el 23 de junio.