Campaña de Kamala Harris y Partido Demócrata terminaron las elecciones sin deuda

La campaña de la vicepresidenta Kamala Harris y el Comité Nacional Demócrata gastaron cerca de US$1.500 millones en su fallida candidatura presidencial, pero no se endeudaron al hacerlo, según el director financiero de la campaña.

Los medios de comunicación conservadores han informado de que la campaña fallida de Harris gastó grandes sumas de dinero en eventos con celebridades como Lady Gaga y Oprah Winfrey, donaciones a grupos activistas, aviones privados y consultores. Pero ni esos gastos, ni sus enormes desembolsos en publicidad y campañas de movilización de votantes, condujeron a un déficit presupuestario.

“Al día de las elecciones, no había deudas pendientes ni facturas vencidas”, dijo Patrick Stauffer, director financiero de Harris for President. Agregó que “no habrá deuda” cuando la campaña y el DNC presenten sus próximas declaraciones a la Comisión Federal Electoral el 5 de diciembre, que cubren los gastos del 17 de octubre al 25 de noviembre.

La campaña de Harris tenía como objetivo gastar cada dólar disponible para ganar las elecciones, según una persona familiarizada con sus operaciones. No hay ningún beneficio en tener dinero sobrante que pueda usarse para llegar a los votantes, dijo la persona, que pidió el anonimato para poder hablar de asuntos delicados.

Las críticas a algunos pagos, como US$1 millón pagado a la compañía de producción de Winfrey para la puesta en escena del evento, no tienen en cuenta las leyes de financiación de campañas, que prohíben a las empresas contribuir a las campañas o proporcionar servicios a precios inferiores a los del mercado, dijo la fuente.

Si bien las celebridades como Winfrey podían aparecer en eventos de forma gratuita, la campaña tenía que pagar los costos de organizarlos.

Desde que perdió la carrera la semana pasada ante el presidente electo Donald Trump, la campaña de Harris ya no está recaudando dinero y está llegando a su fin, dijo la fuente. Ese proceso puede llevar meses o años, ya que recibe y paga las facturas.

Se estaba preparando para recaudar fondos adicionales después del día de las elecciones si el resultado no era claro de inmediato y se producían batallas legales. Esos fondos no fueron necesarios después de que Trump ganara todos los estados clave por márgenes cómodos.

Solo los candidatos activos o aquellos que terminaron endeudados pueden recaudar dinero bajo la ley electoral federal. Trump, que no puede postularse a la reelección, convirtió el martes su comité de campaña de 2024 en un comité de acción política de liderazgo para poder seguir recurriendo a sus donantes.

El DNC sigue recaudando fondos activamente, incluso a partir de las listas de donantes de Harris. A corto plazo, se está preparando para elecciones legislativas especiales para llenar los escaños que quedaron vacantes después de que Trump nombró a miembros de la Cámara de Representantes en funciones para su gabinete, incluidos los representantes Elise Stefanik de Nueva York y Michael Waltz de Florida.

También respalda la infraestructura técnica y de datos que beneficia a los demócratas en todos los niveles de la boleta.

“El trabajo del DNC continúa con seriedad después del día de las elecciones, por lo que nuestra recaudación de fondos también continúa”, dijo la portavoz del partido, Rosemary Boeglin. Agregó que el partido no está endeudado y está listo para liderar la lucha contra Trump.

El partido también está recaudando dinero para las elecciones de mitad de período de 2026, dentro de menos de dos años.