Caos político de Francia mantiene la economía atrapada en crisis de bajo crecimiento

El estancamiento político y fiscal de Francia ha atrapado a la economía en un bajo crecimiento, lo que aumenta la presión sobre el recién nombrado primer ministro, François Bayrou, para que elija un gobierno y elabore rápidamente un presupuesto para 2025.

Se prevé que la segunda mayor economía de la zona del euro se expanda solo un 0,2% al trimestre en el primer semestre del próximo año con una demanda interna débil y una desaceleración del apoyo de unas exportaciones inusualmente fuertes, según una evaluación actualizada de la agencia de estadísticas del país.

El informe se suma a las señales de que el tumulto político desde las elecciones anticipadas de junio está afectando cada vez más a la economía. Los indicadores de confianza de las empresas y los hogares han estado cayendo durante varios meses y el Banco de Francia también redujo sus previsiones de crecimiento el lunes.

“El crecimiento será modesto”, dijo el economista del Insee Dorian Roucher en una conferencia de prensa en París. “El gasto público se frenará, las empresas estarán en la niebla y su inversión será baja, el comercio se normalizará y sólo el consumo impulsará un poco el crecimiento francés”.

Bayrou fue designado la semana pasada para formar un nuevo gobierno y un plan para reparar las finanzas públicas después de que su predecesor, Michel Barnier, fuera desalojado en una moción de censura que también torpedeó el proyecto de ley de presupuesto para 2025.

Pero el nuevo primer ministro se enfrenta a los mismos retos políticos insolubles, sin una mayoría posible en una Asamblea Nacional fragmentada en tres bloques opuestos. Mientras Bayrou continúa las consultas sobre la formación de un nuevo gabinete, el parlamento se dispone a debatir una legislación de emergencia para evitar un cierre del estado el 1 de enero.

El martes, en respuesta a las preguntas de los legisladores, el primer ministro dijo que intentará proponer un nuevo gobierno para que el presidente Emmanuel Macron lo nombre "en los próximos días", antes de presentar sus políticas al parlamento. Según Bayrou, intentará trabajar con legisladores con diferentes sensibilidades políticas para negociar un nuevo presupuesto para 2025.

“Quizás sea un optimismo poco realista, pero estoy seguro de que existe el camino para que cada parte dé pasos para que al menos tengamos la certeza de acercarnos un poco más al consenso necesario”, dijo.

Insee dijo que tener un nuevo presupuesto podría dar un impulso a la economía al brindar más certeza, pero nuevas medidas para reducir el déficit también podrían resultar recesivas.

“El contexto político incierto es susceptible de cambiar el comportamiento de los agentes económicos, provocando una actitud expectante por parte de los hogares y las empresas”, señaló la agencia de estadísticas en su informe.

Los líderes empresariales han advertido que la agitación política ya ha provocado un rápido deterioro de la actividad y han pedido claridad sobre cómo el próximo gobierno abordará el desafío presupuestario.

En declaraciones a Bloomberg Television el martes, el presidente emérito de Publicis Groupe SA, Maurice Levy, dijo que no espera una resolución rápida dadas las divisiones en la Asamblea Nacional, y tal vez no antes del final del segundo mandato de Macron en 2027.

"Estaremos en un punto muerto durante un breve periodo; cuando digo un breve periodo, me temo que hasta el final del mandato de Emmanuel Macron", dijo Levy al margen de una conferencia en París.

Si bien las previsiones del Insee no van más allá de junio, implican que sólo una mejora excepcionalmente marcada sería suficiente para que la economía volviera a encarrilarse, de acuerdo con el pronóstico de la administración saliente de un crecimiento del 1,1% el año próximo. Según Roucher, sería necesario alcanzar una tasa de crecimiento trimestral cercana al 0,8% en el segundo semestre de este año.

“En realidad, para llegar al 1,1% en 2025, los riesgos positivos tendrían que hacerse realidad desde principios de año”, dijo Roucher. “Nuestro escenario central es que el crecimiento se mantenga en un nivel bajo”.