CEO de BMW espera que la ola de inversiones en chips facilite la crisis de suministro

BMW AG espera que la escasez global de semiconductores que obstaculiza la producción automotriz se resuelva en un par de años a medida que las empresas y los gobiernos trabajen para superar la escasez.

"Hay un enfoque intenso en el tema a nivel mundial, por lo que es de esperar que la oferta y la demanda vuelvan a equilibrarse dentro de dos años a más tardar", dijo el director ejecutivo Oliver Zipse en una entrevista el jueves en la academia de conducción de la compañía cerca de Múnich.

La falta de chips que se utilizan en todo, desde los sistemas de navegación hasta ciertos espejos retrovisores, ha obligado a los fabricantes de automóviles a reducir la producción justo cuando la demanda se recupera nuevamente en las principales economías que están aliviando las restricciones pandémicas. Mientras que Ford Motor Co. estimó el mes pasado que la escasez de semiconductores recortará las ganancias en US$2.500 millones este año, BMW solo ha informado de paradas limitadas en dos plantas europeas.

La visión optimista de Zipse contrasta con la de algunos de sus compañeros fabricantes de automóviles. El director ejecutivo de Renault SA, Luca De Meo, dijo el jueves que la crisis de los chips ha puesto de manifiesto la fragilidad "aterradora" de las complejas líneas de suministro en las que industrias enteras dependen de fabricantes altamente especializados. Las estrategias que podrían haber sido válidas hace dos décadas deberían revisarse, dijo.

Volkswagen AG también advirtió que la escasez de semiconductores se volverá más pronunciada en el segundo trimestre, aunque todavía elevó su perspectiva de ganancias para todo el año esta semana. BMW envió un mensaje igualmente optimista el viernes, diciendo que espera que los retornos automotrices alcancen el límite superior de su pronóstico del 6% al 8%. La fuerte demanda que se extiende desde China a EE.UU. y Europa está ayudando a compensar los precios más altos de materias primas como el cobre.

"No podemos esperar permanecer completamente ilesos por la escasez de chips durante el segundo trimestre", dijo Zipse. "Pero la extensión no significará un impacto significativo en nuestras ganancias".

BMW subió hasta un 2,1% en Frankfurt, extendiendo las ganancias de este año al 18%. El fabricante de automóviles dijo que los costos adicionales de hasta US$1.200 millones por el aumento de los precios de las materias primas se verán parcialmente atenuados por las ganancias cambiarias, lo que reducirá el impacto neto a unos US$500 millones. Los precios más altos del rodio, el paladio y el acero son particularmente preocupantes, dijo BMW.

La escasez de chips que surgió después de que los consumidores compraran aparatos electrónicos en masa mientras estaban confinados en sus hogares ha impulsado amplios esfuerzos para impulsar la producción. La Comisión Europea planea duplicar la producción del bloque a al menos el 20% del suministro mundial para 2030, una medida que reduciría su dependencia de empresas extranjeras.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha comprometido a asegurar mejor la cadena de suministro de Estados Unidos reviviendo la fabricación nacional de chips. Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. gastará hasta $ 28 mil millones en nuevas plantas y equipos este año.

Mientras esperan que los programas de inversión se aceleren, los fabricantes no han tenido más remedio que dejar inactivas las plantas o dar el paso inusual de eliminar ciertas características de alta tecnología de modelos seleccionados.

Zipse dijo que BMW no tiene planes de buscar nuevas asociaciones o empresas conjuntas, a pesar de las restricciones actuales.

"Para los componentes críticos, nos ceñiremos a los contratos de suministro a largo plazo y una variedad de socios diferentes", dijo. Esto incluirá celdas de batería críticas para acelerar el lanzamiento de vehículos eléctricos de BMW, dijo. “Desde nuestro punto de vista, hemos cubierto los suministros necesarios con contratos a largo plazo”.