China creció pese a covid-19, pero también incrementaron sus emisiones de carbono
jueves, 4 de febrero de 2021
Los futuros de carbono se dispararon hasta 7,4%, a US$45,15 por tonelada métrica, en la jornada de negociación del miércoles
Bloomberg
China probablemente fue la única gran economía que creció el año pasado después de contener rápidamente el covid-19. También es la única economía importante que tuvo un aumento en sus emisiones de carbono durante 2020.
En diciembre, las emisiones superaron los niveles de 2019 por primera vez en todo el año, según datos de Carbon Monitor, un esfuerzo de colaboración entre investigadores en China, Europa y Estados Unidos que ofrece un seguimiento casi en tiempo real. Para 2020, las emisiones totales en el país se elevaron a 10.500 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, es decir 0,5% más que el año anterior.
El aumento se produce mientras que las emisiones globales probablemente disminuyeron 4,4% en 2020, según Carbon Monitor, con caídas en Brasil de aproximadamente 10% y casi 13% en Estados Unidos.
Las emisiones de China cayeron 11% en el primer trimestre, durante su estricta cuarentena por covid-19, y el producto interno bruto (PIB) se contrajo 6,8% respecto al mismo periodo del año anterior.
La investigación de Carbon Monitor captura las emisiones derivadas de la quema de combustibles fósiles y de la producción de cemento. Sus tarifas están sujetas a cambios a medida que hay más datos disponibles.
Las emisiones resaltan el desafío que enfrentan China y el resto del mundo a medida que buscan equilibrar la reactivación económica y los objetivos climáticos a largo plazo. Dado que fue el primer país en encontrar y contener el virus, el proceso de la pandemia en China a menudo ha presagiado las experiencias de otros países.
La recuperación de China se aceleró el mes pasado, permitiéndole superar a sus rivales. La producción industrial aumentó en el cuarto trimestre, con una producción de más de 1.000 millones de toneladas de acero crudo en 2020, un récord anual.
Los planes climáticos a largo plazo del país asiático incluyen alcanzar las emisiones máximas para 2030 a más tardar, y lograr cero emisiones netas para 2060. Para cumplir este objetivo, se requiere una revisión de su sector eléctrico a base de carbón, que generó casi la mitad de las emisiones del país en 2020, según datos de Carbon Monitor.
Mercado de carbono en récord
Los precios de las emisiones de carbono aumentaron a un nivel récord en medio de la creciente especulación sobre la magnitud que tendrán los permisos de contaminación a medida que la Unión Europea trabaja para eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los futuros se dispararon hasta 7,4% a 37,56 euro (US$45,15) por tonelada métrica. El alza se vio favorecida por la venta de permisos de Polonia a 38 euros (US$45,79), una prima considerable frente a la tasa vigente en una subasta diaria regular, que generalmente se liquida con un descuento.
El repunte reforzó los argumentos de que los precios más altos aún están por venir, y algunos fondos de cobertura apostaron a que el precio alcanzará los tres dígitos en los próximos años. La Unión Europea está promulgando planes para una economía neutral en carbono para mediados de siglo y un precio más alto del carbono, una de las herramientas clave de la política ambiental, puede ser crucial.
El sistema de límite y comercio de la Unión Europea, el mayor mercado de carbono del mundo, cubre más de 11.000 instalaciones que utilizan energía, como centrales eléctricas, productores de acero y plantas químicas. La idea es que las empresas puedan contaminar, pero deben pagarlo, lo que le da una ventaja a las que pueden reducir sus emisiones.
Los compradores pueden obtener permisos en el mercado o en subastas diarias. Por lo general, la subasta los cotiza unos pocos centavos por debajo del precio de mercado. Pero el miércoles, la venta de Polonia fue claramente más alta de lo que alguien podría haber pagado en el mercado.
Esto podría deberse a que algunos actores están vendiendo derivados vinculados al precio de la subasta, según Jan Kresnik, un operador carbono de Belektron, un corredor en Eslovenia.
El precio podría haber sido aún mayor hoy. Hubo una oferta máxima en la subasta de 50 euros (US$60,2), superior al récord del año pasado de 40 euros (US$48,2).