China endureció restricciones comerciales para inversionistas ante caídas de la bolsa

China está endureciendo las restricciones comerciales a los inversionistas institucionales nacionales, así como a algunas unidades extraterritoriales, mientras las autoridades luchan por frenar la creciente caída de las acciones, según reportó Bloomberg.

Esta semana, las autoridades impusieron topes a los swaps de rentabilidad total transfronterizos de algunas agencias de valores con clientes, lo que limita un canal que pueden utilizar los inversores con sede en China para ponerse cortos en acciones de Hong Kong. Al mismo tiempo, a algunos corredores chinos que utilizan el canal para comprar acciones de China continental para sus unidades en el extranjero se les dijo que no redujeran sus posiciones, dijeron las personas.

Por otra parte, se prohibió a algunos fondos de cobertura cuantitativa colocar órdenes de venta por completo a partir del lunes, mientras que a otros se les prohibió recortar posiciones en acciones en sus fondos apalancados de mercado neutral. Se cree que estas apuestas, conocidas como estrategia de acceso directo al mercado, han amplificado la reciente liquidación de valores de pequeña capitalización, añadieron.

China está tratando de estabilizar los mercados después de que las acciones se hundieran la semana pasada en caóticas operaciones hasta su nivel más bajo en cinco años. Los últimos movimientos se suman a las medidas poco sistemáticas que los responsables políticos han tomado en su lucha por poner fin a una caída de tres años que ha borrado unos US$7 billones de valor y ha minado la confianza en la segunda economía más grande del mundo.

En un comunicado hecho público el lunes, la Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China dijo que recientemente había descubierto múltiples casos de manipulación bursátil y "ventas en corto malintencionadas". El regulador prometió actuar con rapidez para poner fin a los comportamientos ilegales que obstaculizan el funcionamiento estable del mercado de valores y perjudican a los inversionistas.

La debilidad de los datos económicos, las tensiones geopolíticas con Estados Unidos, el agravamiento de la crisis inmobiliaria y la opacidad del sector financiero han lastrado el ánimo de los inversionistas. Las peticiones de márgenes y la liquidación forzosa a la que se enfrentan los accionistas se perfilan como puntos clave de presión después de que la última promesa de apoyo ofreciera pocos detalles.

Las acciones repuntaron el lunes por la tarde, ya que el regulador de valores afirmó que tomará medidas para prevenir los riesgos derivados de las promesas de acciones. El índice CSI 300 cerró la jornada con una subida del 0,7%, tras una caída previa del 2,1%. Los valores de pequeña capitalización recortaron pérdidas, pero cerraron en números rojos.

El índice Hang Seng de Hong Kong ha caído 9% este año tras cuatro años consecutivos de pérdidas, mientras que el índice CSI 300, de referencia en tierra, ha bajado casi 7% y cotiza cerca del nivel más bajo desde 2019.

Las medidas para limitar las ventas podrían proporcionar cierto alivio a corto plazo, pero podrían ser contraproducentes ya que los inversores se preocupan por su capacidad para salir del mercado, dijo Michael Hirson, economista de China en 22V Research en Nueva York. Pekín podría llevar a cabo grandes compras de acciones, aunque sería costoso y no está claro que el tema se haya vuelto lo suficientemente urgente como para que lo hagan, agregó. "El resultado neto es que podrían apañárselas con medidas provisionales y esperar a que las ventas sigan su curso", dijo.