China revela nuevos aranceles de 5% y 10% a bienes fabricados en Estados Unidos
viernes, 23 de agosto de 2019
El Ministerio de Comercio dijo en un comunicado que impondría aranceles adicionales de un 5% o un 10%
China informó hoy que impondrá nuevos aranceles a bienes estadounidenses valorados en US$75.000 millones, en la más reciente escalada de la disputa comercial entre las dos economías más grandes del mundo, según informó Reuters.
Mediante un comunicado, el Ministerio de Comercio explicó que los aranceles adicionales de 5% o 10% se impondrán sobre 5.078 productos fabricados en Estados Unidos, que incluyen bienes agrícolas, petróleo, pequeñas aeronaves y automóviles.
Esta es una respuesta al anuncio hecho por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a inicios de agosto cuando informó que aprobaba un impuesto de 10% a productos chinos que sumarían un valor de US$300.000 millones y que entran en vigencia también desde el 1 de septiembre. De acuerdo con Reuters, entre los bienes que se verán afectados se encuentran desde productos tecnológicos como celulares y computadores hasta otros artículos como los juguetes.
Sin embargo, no habían pasado dos semanas cuando el Mandatario de EE.UU. anunció que había aprobado una prórroga de la imposición del arancel (hasta el 15 de diciembre) para cierta parte de este grupo de productos de US$300.000 millones para no afectar las ventas de Navidad. Por medio de redes sociales, el pasado 13 de agosto, Trump dijo que ciertas categorías como los juguetes, los computadores, los teléfonos móviles y los videojuegos fabricados en China que entren a Estados Unidos estarían exentos de ese nuevo impuesto.
La lista de los productos excluidos, según publicó en esa fecha The Wall Street Journal, incluye los artículos de mayor boleto que enfrentan tarifas. “Los teléfonos celulares y las computadoras portátiles solo representan más de US$100.000 millones en comercio”, explica el medio estadounidense.
Antes de este anuncio en agosto de este año, Trump ya había impuesto un arancel de 25% de una gama de bienes chinos que suman un valor de US$250.000 millones.
Datos del Observatorio Económico Latinoamericano ubican el inicio de esta guerra comercial en los meses de marzo-abril de 2018, cuando EE.UU. impuso un arancel de 25% a dos categorías de productos chinos y el país asiático respondió con un arancel también de 25% por un monto de US$3.000 millones.
Según precisó el Gobierno de China, estos nuevos aranceles sobre algunos productos entrarían en vigencia el 1 de septiembre y el resto el 15 de diciembre.
Una de las precisiones que anunció el gobierno de Pekín es que la tarifa de 25% será para los automóviles procedentes de EE.UU. y 5 % para las piezas sueltas (repuestos o accesorios) a partir del 15 de diciembre. El incremento de las tarifas de EE.UU. "ha llevado a una continua escalada de las fricciones económicas y comerciales entre China y Estados Unidos, violando el consenso alcanzado por los dos jefes de Estado en Argentina y en Osaka", reza el comunicado la oficina de la Comisión de Aranceles Aduaneros del Consejo de Estado chino.
Pese a estos anuncios, hoy el asesor comercial de la Casa Blanca Peter Navarro dijo que no cree que la guerra comercial con China haga subir los precios ni desacelere la economía de Estados Unidos, reseñó Reuters.
"Hemos tenido estos aranceles vigentes por un largo tiempo. China está soportando toda la carga al recortar sus precios, al reducir el valor de su moneda, y por cierto se están desangrando, su cadena de suministros está yéndose al resto del mundo y de regreso a Estados Unidos", dijo en una entrevista con Fox Business Network.
"Las negociaciones continuarán, tal como ha sido. Se realizarán a puertas cerradas", agregó.