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Citigroup valora Banco Espirito Santo en solo US$0,013 por acción

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Analistas e inversores comienzan a poner en su punto de mira a Banco Espirito Santo de cara a su regreso a la cotización, y sus movimientos apuntan a un nuevo desplome en sus acciones.

La cotización de Banco Espirito Santo agravó su desplome en las dos últimas jornadas de la semana pasada, con dos caídas consecutivas superiores al 40%. Desde entonces han estado suspendidas de cotización.

En este periodo el Banco de Portugal ha desvelado los planes aprobados para el rescate de su mayor banco. La escisión de la entidad dará lugar a la creación de Novo Banco: una entidad saneada y que, en la práctica, tendrá un único accionista, el Fondo de Resolución.

El Fondo se queda con lo que los analistas llaman el "BES bueno", es decir, ya recapitalizado y con los créditos sin riesgo y los activos de buena calidad. Por el contrario, los actuales accionistas, entre ellos la familia Espírito Santo y Crédit Agricole, se quedan con el "BES malo", que seguirá llamándose BES y al que serían transferidos los activos tóxicos y los más problemáticos.

Los analistas de Citigroup ya han reaccionado a esta escisión, y lo han hecho con una drástica rebaja de su valoración. La firma estadounidense reduce prácticamente a cero, a US$0,013, el precio objetivo de BES, el 'banco malo'. Su anterior precio objetivo se elevaba a US$0,48.

Euronext ha anunciado que excluirá a BES del índice de referencia de la Bolsa de Lisboa, el PSI 20.

Al cierre del pasado viernes, las acciones de Espirito Santo se desinflaron a nuevos mínimos históricos, hasta los US$0,16. Su capitalización bursátil se reducía de esta forma a apenas US$902,46 millones.

Pero no sólo las firmas de inversión han tenido que ajustar sus valoraciones sobre Espirito Santo. Crédit Agricole, accionista del grupo portugués con un 14,6%, ha adoptado una provisión de US$946,5 millones para cubrir las pérdidas derivadas de la crisis de BES.