Colapso de represa de la minera Vale fue causado por diseño defectuoso
jueves, 12 de diciembre de 2019
La presa en el yacimiento de mineral de hierro Feijão estaba demasiado empinada y tenía drenaje insuficiente
Bloomberg
Un diseño defectuoso es la razón principal detrás del colapso fatal de una presa de relaves brasileña en enero, propiedad del gigante de mineral de hierro Vale SA, según el informe de un panel de expertos publicado el jueves.
La presa de relaves en el yacimiento de mineral de hierro Feijão de Vale estaba demasiado empinada y tenía un drenaje insuficiente, lo que resultó en altos niveles de agua que forzaron la estructura, según el informe de cuatro expertos independientes, encargado por Vale. El evento liberó un cúmulo de desechos mineros en el estado de Minas Gerais y mató a cientos de personas, lo que llevó a la industria minera mundial a revisar los procedimientos operativos.
El alto contenido de mineral de hierro de los relaves —los desechos de la extracción del mineral de hierro del suelo— generó la cohesión entre las partículas y provocó el quiebre del material. Aun así, ninguno de los dispositivos de monitoreo en el proyecto detectó un debilitamiento de la estructura que no mostraba grandes deformaciones que pudieran derivar en el colapso, según el informe. Los expertos, además, descartaron que la rotura de la presa fuera causada por la actividad sísmica o la instalación de drenes horizontales profundos en el sitio.
La ruptura de la presa desató un lago de desechos mineros que sepultó un comedor para trabajadores y partes de un pueblo cercano y fue la segunda falla mortal de una presa en un proyecto de Vale desde finales de 2015. Vale, el mayor productor de mineral de hierro del mundo y uno de los cuatro proveedores principales a nivel mundial, redujo su producción del componente para la fabricación de acero tras el desastre, cerró otras minas como medida de precaución y solo las ha reactivado gradualmente.
Este mes, Vale dijo que finalmente podría aumentar la producción de mineral de hierro a un récord en 2022, cuando la producción ascienda a 400 millones de toneladas.