Ambiente

Colombia es el tercero de la región más avanzado en transición energética

Uruguay y Costa Rica son líderes en América Latina en cuanto a producción de energías renovables. La meta es ser carbono neutral

Nathalia Vargas

En 2021, América Latina alcanzó 60% de capacidad instalada de producción de energías renovables, principalmente debido a las fuentes hidroeléctricas, según datos de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade). Colombia es el tercer país de la región que más avanza en la materia con 65,93%, según el Índice de Transición Energética (ETI) del Foro Económico Mundial. La nación que más se destaca es Uruguay, con 70,59%; seguido por Costa Rica, con 66,17%. Brasil está de cuarto, con 65,87%; y Chile, con 65,08%.

Este índice mide el desempeño de los sistemas de energía de 115 países en dos áreas: preparación para la transición y rendimiento del sistema. Para ello se tienen en cuenta factores como desarrollo y crecimiento económico, seguridad energética y sostenibilidad medioambiental. En estos pilares, la región obtuvo una puntuación de 65,8 en promedio y un porcentaje de 58,6%, siendo el desarrollo económico y el crecimiento los puntos más débiles de Latinoamérica.

Según el estudio, Uruguay es el país que más se destaca en la región, pues cerca de 98% de la energía que se produce en ese país proviene de fuentes renovables, especialmente de la hidroeléctrica, solar y eólica. Ahora, el país le apuesta a alcanzar la meta de carbono neutro en 2050, un desafío que el Gobierno llama la “segunda transición energética”. Con ello se busca descarbonizar el resto de su economía, que todavía depende de combustibles fósiles, como es el caso del sector transporte.

En el caso de Costa Rica, el país también ha estado trabajando con cerca de 98% de energía renovable desde 2014, impulsado principalmente por la hidroeléctrica (67,5%), seguido por la eólica (17,0%), geotérmica (13,5%), plantas de respaldo (1,16%) y paneles solares (0,84%), según el Foro Económico Mundial.

LOS CONTRASTES

  • Alexandre StaffRepresentante para América Latina del BEI

    “El Gobierno colombiano deberá mirar si toma los recursos que le genera el petróleo para invertir en la producción de nuevas fuentes de energía renovable”.

  • Tomas GonzálezDirector del Centro de Estudios de Energía

    “La transición va a requerir mucha inversión y sin el sector privado no se puede hacer, por eso es importante que el sector público tenga una política que facilite los cambios”.

Tanto en la región como a nivel global, el país ocupa una alta posición en el uso de energía verde. En el caso de Colombia, la mayoría de energía renovable que se genera proviene de plantas hidroeléctricas, lo que representa 67,2 % (11.974 MW) del total de la matriz energética, según el Ministerio de Minas y Energía. En cuanto a la producción de energía solar y eólica, la cartera ha señalado que las plantas del país tienen una capacidad para generar 1.365 MW. Además, con los proyectos que están en desarrollo se estima que en los próximos años tendrá una capacidad de más de 4.500 MW de fuentes renovables.

Según el Departamento de Planeación Nacional, en 2023 Colombia multiplicará 100 veces su producción energética a partir de fuentes no convencionales de energía renovables. Así mismo, el Estado espera cumplir con el compromiso adquirido de la neutralidad del carbono para 2050, lo que implicará una mayor inversión.

¿Cómo está la región frente al mundo?

Más de una cuarta parte de la energía que se produce en América Latina proviene de energías renovables, lo que equivale al doble del promedio mundial, según el Foro Económico Mundial. Si bien la mayoría de países a nivel global buscan descarbonizar sus economías y aumentar la producción de fuentes renovables para 2050, casi dos tercios de las naciones de la región ya lo han hecho. Uno de los casos más interesantes es el de Brasil, pues pese ser un gran productor de petróleo en el mundo, 86% de su energía es de fuentes nucleares o renovables.

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