En índice de corrupción de Transparencia Internacional, Colombia mejoró un puesto
martes, 19 de marzo de 2024
Mientras que Colombia obtuvo su mejor puesto en 11 años, Venezuela, honduras, Guatemala y Paraguay son las peor calificadas
Uno de los mayores problemas a los que podría enfrentarse, tanto el sector público como el privado, es la corrupción. Su medición resulta compleja, incluso la Dian y el Ministerio de Hacienda han estimado que ese fenómeno le cuesta a Colombia entre $40 y $80 billones por año, dejando un hueco enorme en las finanzas del Estado.
Transparencia Internacional, organización no gubernamental que promueve medidas contra crímenes corporativos y corrupción política en el ámbito internacional publica anualmente su reporte sobre la percepción de corrupción que se evidencia en 180 países del mundo que son incluidos en el informe. A los territorios se les da un puntaje de cero a 100 acorde con factores como corrupción, ausencia de discriminación, impunidad y acceso a la justicia.
Los principales hallazgos demuestran que la región “más transparente” es Europa oriental con un promedio de 65 puntos y la de peor desempeño es África Subsahariana con una media de 33. En América Latina, los dos países de mejor desempeño son Uruguay y Chile al obtener 73 y 66 puntos respectivamente; Colombia se ubicó en el puesto 87 con 40 puntos.
En términos regionales, Uruguay es el único país latinoamericano que figura en el top 20 de Transparencia Internacional. En cambio, Venezuela es el tercer peor calificado de todo el mundo gracias “a los miles de millones de dólares del presupuesto público que han sido desviados para beneficiar a las minorías en el poder mientras que la pobreza y la desigualdad se exacerba”, según la organización.
Un dato esperanzador de la organización es el puntaje máximo alcanzado por Colombia durante 2023. A pesar de ser la séptima nación de la región en términos de transparencia, con 40 puntos, el país podría iniciar una senda de crecimiento si “se robustece la justicia y las instancias judiciales conservan su independencia”, explicó TI.
Como ya se mencionó previamente, Europa es el continente mejor calificado por la organización, es decir, sus índices de corrupción son los más bajos del mundo. Dinamarca se ubicó en la primera posición del ranking por sexta vez consecutiva tras obtener 80 puntos en el índice. Los daneses son seguidos por Finlandia con 87 y Noruega con 84.
Como contraparte, TI expresó que la región podría experimentar un declive en el rendimiento si no se hace un seguimiento riguroso de las cuentas estatales o la corrupción política aparezca. Así mismo, detallaron que en algunos casos, en Rusia por ejemplo, se han presentado casos de ataques a periodistas y a aquellos denunciantes de irregularidades ante las instituciones de control.
La organización mostró su preocupación acerca del impacto de la corrupción en el mundo. A pesar de que 190 países se comprometieron a enfocar su esfuerzos por combatir la corrupción desde la primera convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción, Uncac por sus siglas en inglés, cerca de 80% de la población mundial vive en países en democracias con fallas (según la clasificación de The Economist) gracias a puntajes menores a 43.
En contraste, el top 25 de los países calificados por la organización solo representa 10% de la población del mundo, lo que demuestra que en estos países en los que la aplicación de la ley es rigurosa, las instituciones son confiables y los sistemas democráticos son estables.
Las recomendaciones hechas por TI apuntan a que se deben fortalecer la independencia de los sistemas judiciales a partir de la obtención de puestos por mérito y no por intereses y el acceso a datos para el público se debe garantizar.
También resaltan que aquellas personas de la rama judicial deben ser íntegras e honestas para evitar presiones externas que injieran en la toma de decisiones. Así mismo, promueven un trabajo coordinado entre las dependencias.