Globoeconomía

Con la calma restaurada, Gobierno podrá enfocarse en la economía

Michelle Zayed Atallah

Después de toda tormenta viene la calma, o pues así se espera en el caso de Venezuela tras unas elecciones que dejaron a Nicolás Maduro como el ganador pero que causaron protestas alrededor del país y un fuerte desacuerdo por parte de la oposición.

Con su juramento, el ahora presidente tendrá oportunidad para enfocarse en los problemas del país, en especial su economía.

La tensión del país se apaciguó después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) accediera a una auditoría del 100% de los votos electrónicos, la cual está planeada para el domingo. Aún así, Maduro se posesionó en la presidencia oficialmente ayer (aunque la oposición aun no lo reconoce), dando el primer paso para que empiecen los cambios económicos del país.

Las tensiones del país estaban preocupando a los empresarios miembros de Fedecamaras, quienes hicieron un llamado a la paz y pidieron “mantener el aparato productivo nacional en normal desenvolvimiento”.

Con el momento bajo control, Maduro deberá cambiar su enfoque para recuperar la economía de su país que actualmente se encuentra cada vez más cerca de estallar. Todo indica que la forma de desactivar “el estallido” es cortando el elevado gasto público, subsidios excesivos, y corrigiendo políticas equivocadas como una amplia nómina pública y el desestímulo de la inversión privada.

Sin embargo aunque los humos se han bajado en el país bolivariano, los expertos dudan el cambio económico venga de manera contundente bajo el mandato de Maduro. El director del programa de Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana, Iván Garzón, aseguró que si el gobierno quiere mantenerse en el poder deberá hacer un cambio extremo en sus políticas económicas.