Corea del Norte niega haber atacado a Sony y pide investigación conjunta con EE.UU.
sábado, 20 de diciembre de 2014
Reuters
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Norte, que no dio su nombre, dijo que habría "graves consecuencias" si Washington rechaza la propuesta y continúa con las acusaciones, según la misión norcoreana ante la ONU y la agencia oficial de noticias del régimen, Kcna.
El viernes, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, culpó a Pyongyang por el ataque a las redes de la productora de cine, que llevó a la cancelación del estreno de "The Interview", una comedia que gira en torno al asesinato del líder del país asiático, Kim Jong Un.
En su primera respuesta a estas acusaciones, el Gobierno norcoreano aseguró que podía probar que no estuvo involucrado en el ataque informático masivo.
"Proponemos realizar una investigación conjunta con Estados Unidos en respuesta a las calumnias sin base alguna vertidas desde allí para movilizar a la opinión pública", dijo el portavoz de Corea del Norte, citado por Kcna.
"Si Estados Unidos rechaza nuestra propuesta de investigación conjunta y continúa hablando de llevar a cabo algún tipo de respuesta inmiscuyéndonos en este caso, debe advertir de que habrá graves consecuencias", sentenció.
Más tarde, la misión de Corea del Norte ante la ONU citó al portavoz haciendo comentarios similares.
En respuesta a eso, el portavoz del consejo de seguridad nacional de Estados Unidos dijo que el país mantiene su acusación de que Corea del Norte estuvo detrás de los ataques informáticos a Sony.
Previamente, el FBI norteamericano anunció que Corea del Norte estaba detrás del ataque sufrido por Sony y acusó que las acciones del Gobierno de Pyongyang estaban "más allá de las líneas del comportamiento correcto de un Estado".
Obama dijo que Corea del Norte parecía haber actuado por sí misma, sin ayuda. Washington inició consultas con Japón, China, Corea del Sur y Rusia en busca de ayuda para contener a Pyongyang.
Japón y Corea del Sur ya han ofrecido su colaboración, mientras que China, el mayor aliado de Pyongyang, aún no se ha pronunciado, pero un periódico de Pekín dijo que "The Interview" no era una película de la que Hollywood y la sociedad americana pudieran estar orgullosos.
"La burla despiadada de Kim Jong Un es sólo el resultado de una absurda arrogancia cultural", dijo el periódico.
Es la primera ocasión en que Estados Unidos ha acusado directamente a otro país de un ciberataque de esta magnitud en suelo americano y podría desencadenar una nueva confrontación entre dos antiguos enemigos como Washington y Pyongyang.
Obama dijo que hubiera deseado que Sony hubiese hablado con él antes de cancelar la película, sugiriendo que su actuación puede haber sentado un mal precedente. "Creo que se equivocaron", declaró.
"No claudicamos"
El presidente ejecutivo de Sony Pictures, Michael Lynton, insistió en que la compañía no ha capitulado ante los piratas informáticos y que sigue buscando plataformas alternativas para presentar la película.
Esta semana, un portavoz de la empresa dijo que Sony aún no tenía ningún plan para estrenar el filme protagonizado por Seth Rogen y James Franco, que costó más de 44 millones de dólares.
A pesar de la advertencia de Obama a Corea del Norte, sus opciones para responder al ataque parecen escasas.
Corea del Norte ha estado sometida a las sanciones estadounidenses desde hace más de 50 años, pero estas han tenido muy poco efecto en las políticas de Pyongyang sobre derechos humanos o el desarrollo de armas atómicas.
El Estado norcoreano se ha convertido en un experto a la hora de ocultar sus a menudo ilegales actividades económicas, evitando durante mucho tiempo los bancos tradicionales.
En un comunicado por separado divulgado el sábado en respuesta a críticas a su historial sobre derechos humanos, Corea del Norte prometió que elevará su "poder nuclear" para contrarrestar la política hostil de Washington y agregó que se ha hecho evidente que Estados Unidos apunta a invadir al país bajo la excusa de abusos a los derechos humanos.
El FBI aseguró que los análisis técnicos sobre el software usado para atacar las redes de Sony encontraron conexiones con programas desarrollados por "actores norcoreanos" y que hallaron una "coincidencia significativa" con "otras actividades maliciosas en la red" relacionadas previamente con Pyongyang.
En todo caso, ofrecieron pocos detalles sobre cómo habían concluido que Corea del Norte era la culpable de los ataques.
Expertos estadounidenses sitúan entre las opciones de Obama represalias online, persecuciones contra aquellos individuos implicados directamente en el ataque o incluso un aumento de la ayuda militar a Corea del Sur, que técnicamente continúa en guerra con su vecina del norte.
Pero el efecto de cualquier respuesta será limitado, dado el aislamiento de Corea del Norte y el hecho de que ya ha sido gravemente sancionada por su programa nuclear.
También existe el riesgo de que una dura respuesta por parte de los Estados Unidos lleve a una escalada en las redes.