Corea del Norte

Corea del Norte prueba su primer misil balístico de 2024 tras el aumento de arsenal

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El misil fue disparado desde un área cercana a Pyongyang hacia aguas frente a la costa este y viajó unos 1.000 kilómetros (621 millas)

Bloomberg

Corea del Norte disparó el domingo un presunto misil balístico de alcance intermedio en su primer lanzamiento de este tipo en 2024, en medio de la promesa del líder Kim Jong Un de aumentar las capacidades de ataque nuclear del país.

El misil fue disparado desde un área cercana a Pyongyang hacia aguas frente a la costa este y viajó unos 1.000 kilómetros (621 millas), dijo el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur en un mensaje de texto a los periodistas. El ejército del país está trabajando estrechamente con sus homólogos estadounidenses y japoneses para analizar los detalles, dijo el JCS.

Un misil balístico de alcance intermedio está diseñado para volar lo suficientemente lejos como para alcanzar todas las instalaciones militares de Japón y Estados Unidos en Guam, donde el Pentágono dice tener uno de los depósitos de municiones más grandes de Estados Unidos en el mundo.

El despido se produce después de que Kim presidiera una reunión de fijación de políticas de su partido gobernante a finales de diciembre, donde prometió ampliar el arsenal de armas nucleares de Corea del Norte. El parlamento oficial del país se reunirá a partir del lunes para respaldar las políticas del líder.

Al probar un misil balístico, Kim puede demostrar a sus altos mandos y al pueblo norcoreano que el arsenal nuclear del país está dando grandes pasos para poder atacar a Estados Unidos, reforzando el mensaje propagandístico de que su expansión es esencial para evitar una invasión. Fuerzas americanas.

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La última prueba exitosa de Corea del Norte fue el 18 de diciembre, cuando disparó un misil balístico intercontinental diseñado para atacar el territorio continental de Estados Unidos. El misil voló en una trayectoria elevada y cayó al oeste de la principal isla del norte de Japón, Hokkaido.

El último lanzamiento se suma a la presión que Kim ha ejercido sobre el gobierno del presidente conservador surcoreano, Yoon Suk Yeol, que incluye realizar simulacros con fuego real cerca de una frontera náutica que ha sido escenario de enfrentamientos mortales. Kim también dijo que Corea del Norte “ya no debería cometer el error” de considerar a Seúl como un socio para la reunificación.

La agencia de espionaje de Corea del Sur dijo en una inusual declaración pública a finales de diciembre que espera que Corea del Norte lance provocaciones militares y cibernéticas mientras el régimen de Kim pretende atraer la atención antes de las elecciones parlamentarias de Corea del Sur. El Partido del Poder Popular de Yoon busca arrebatarle en abril una mayoría en el organismo al bloque progresista liderado por el Partido Demócrata.

Corea del Norte tiene la costumbre de realizar provocaciones coincidiendo con las elecciones, ya que critica a políticos conservadores como Yoon, que adoptan una postura dura hacia Pyongyang. Corea del Norte ha llamado a Yoon “un traidor títere” y ha amenazado con convertir el Océano Pacífico en un campo de tiro en respuesta a una mayor cooperación militar entre Estados Unidos, Corea del Sur y Japón.

El lanzamiento del misil del domingo se produjo justo antes del anuncio de Corea del Norte de que enviará al ministro de Asuntos Exteriores, Choe Son Hui, a un viaje a Rusia del lunes al miércoles.

El Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, viajó a Pyongyang en octubre en su primer viaje de este tipo en unos cinco años. Se pensó que su visita posiblemente facilitaría una del presidente Vladimir Putin después de que aceptó una invitación de Kim para hacer el viaje al aislado estado asiático cuando los dos se reunieron para una cumbre en Rusia en septiembre.

El viaje de Lavrov fue parte de una serie de reuniones de alto perfil entre los vecinos que comenzaron en julio de 2023, cuando el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, viajó a Pyongyang para conmemorar el aniversario del fin de la Guerra de Corea en 1953. Estados Unidos y Corea del Sur han acusado durante meses a Kim de proporcionar armas y municiones para ayudar en la guerra de Putin en Ucrania, incluido el envío de proyectiles y misiles balísticos. Pyongyang y Moscú han negado las acusaciones.

Corea del Norte podría estar buscando intensificar aún más su cooperación militar con Rusia enviando a Moscú nuevos tipos de misiles guiados tácticos, dijo el ministro de Defensa de Corea del Sur en una entrevista con Yonhap News la semana pasada, añadiendo que Pyongyang pronto podría realizar nuevas pruebas de sus propios misiles. diseñado para realizar ataques nucleares.

Las armas que se sospecha han sido enviadas a Rusia pueden ayudar al Kremlin en su bombardeo de Ucrania, mientras que las ventas podrían proporcionar a Corea del Norte una nueva corriente de ingresos para una economía aislada de gran parte del comercio mundial.

Kim ha ignorado los llamados de Estados Unidos para regresar a las estancadas conversaciones sobre desarme nuclear a través de las cuales Pyongyang podría obtener ayuda económica a cambio del desarme. Mientras tanto, ha estado ocupado modernizando su arsenal de misiles y realizando pruebas de sistemas para atacar a Corea del Sur y Japón, que albergan a la mayor parte del personal militar estadounidense en la región.

Pyongyang disparó 30 misiles balísticos y tres cohetes espaciales en 2023. Entre ellos cinco misiles balísticos intercontinentales que podrían alcanzar el territorio continental de Estados Unidos. El régimen de Kim lanzó más de 70 misiles balísticos en 2022, un récord para el estado.

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