¿Cuántos salarios mínimos cuesta una canasta de 60 productos en Venezuela?

Aunque el dato de inflación en Venezuela bajó en el último mes, el alza del precio de los alimentos básicos no para. Así se reveló tras el informe mensual del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cenda), trabajado en mayo, en el que se informó que la canasta básica, comprendida por 60 productos, presentó un alza de 41,8% y alcanzó un valor, por primera vez de más de 1 millón de bolívares. Específicamente, el costo total fue de 1.218.147 bolívares, que a fecha de hoy se calcula que son aproximadamente US$197,6.

A pesar de que el monto de la canasta básica no parece de un valor fuera de lo normal, la comparación del mismo con el salario mínimo mensual de Venezuela muestra cifras alarmantes, puesto que un salario mínimo en ese país (40.000 bolívares o US$7,36) solo alcanzaría para cubrir 3,3% del monto de la canasta básica.

Otra forma de analizar el alto costo de vida de los venezolanos es el número de salarios mínimos que se necesitan para comprar los productos de la canasta básica: mientras en abril se necesitaban entre 21 y 22 salarios para suplir las necesidades alimenticias, actualmente se necesitan 30 salarios.

Esta realidad solo cambia de manera leve, al incluir el ticket de alimentación, pues con este y un salario mínimo solo se cubriría el precio de 5,3% de la canasta.

Las estimaciones de Cenda indican que comparándose el valor de la canasta para mayo de 2019 con el del mismo mes en 2018, ésta ha crecido en precio en 167.230%, mientras que en lo corrido del año dicho ese variación asciende a una cifra de 1.059,66%.

Los altos incrementos en los precios de la canasta no son novedad en la agenda venezolana, puesto que en los primeros cinco meses del año se han presentado alzas superiores a 18%, siendo enero el mes de mayor alza en este rubro, cuando se subieron los precios en más de 242%. Marzo fue el mes más benevolente con el bolsillo de los trabajadores, pues el incremento de los precios fue de tan solo 18,5%, el más bajo en el año.

Este desbalance ha llevado, incluso, a que cambien los hábitos alimenticios de la población venezolana. De acuerdo con Edison Arciniegas, director de Ciudadanos en Acción, se ha pasado a comer lo más barato posible, lo que ha desembocado en un aumento en la ingesta de alimentos como cereales, hasta un notable descenso en la compra de carne o de huevos.

“En el caso del acceso a los alimentos a los bienes básicos este es precario y se apunta siempre al de más rendimiento, al que llene más. Por esto, 80% de las calorías provienen de cereales y lo máximo de este origen debería ser 50%”, explicó Arciniegas.

Sin embargo, según el informe de Cenda, los alimentos cobijados bajo la categoría de cereales y productos derivados fueron los que presentaron la mayor alza de precios, ya que solo durante mayo su valor aumentó 76,2% frente al costo registrado en abril. Con 60,1% de crecimiento con respecto al mismo mes, la categoría de carnes y sus preparados fue la segunda que mostró un incremento más importante. Las grasas y aceites se encarecieron 56% en el mes y se configuraron como la tercera categoría que más aumentó su costo en este lapso.

Tomando solo el precio de un rubro que contienen proteína, es decir, los que engloban temas como carnes o huevos, se necesitan más de 360.000 bolívares (US$58,39) mensuales para comprarlos, lo que se traduce en cerca de nueve salarios mínimos en una economía en la que este sueldo se debate entre US$6 y poco más de US$7 por mes.

Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, concluyó que las políticas económicas del actual gobierno no han sido las más beneficiosas para el alza en los precios. “Creemos que la economía se debe comportar de una forma en la que hay que tomar medidas donde no se ponga el riesgo la estabilidad a largo plazo. En Venezuela, se han tomado algunas incluso nocivas, como fue el mismo Bolívar soberano que en menos de un año ya se comió la cifra real y perdió toda su capacidad”, explicó Rodríguez.

No obstante, los precios no son lo único que preocupa a los venezolanos, ya que se ha extendido también un problema de abastecimiento. De los 60 productos incluidos en la canasta, 13 elementos no se consiguen con regularidad en los mercados del país.