El presidente del Gobierno español no se va y dice que seguirá "aún con más fuerza"
lunes, 29 de abril de 2024
Sánchez dijo que, en los próximos meses, parte de su labor será la de conseguir "que la mayoría social se movilice en el sentido común"
Expansión - Madrid
El presidente del Gobierno apela a una reflexión colectiva para "poner fin a la política de la vergüenza": "Llevamos demasiado tiempo dejando que el fango contamine la vida pública".
Se acabó la incertidumbre. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este lunes que permanecerá en su cargo. "He decidido seguir al frente de la Presidencia con más fuerza", ha confirmado Sánchez, "con el compromiso de trabajar por la regeneración pendiente de nuestra democracia y por el avance y consolidación de derechos y libertades".
La decisión del Jefe del Ejecutivo se produce tras los cinco días de reflexión que anunció que se tomaría el miércoles pasado, después de que un juzgado de Madrid abriera diligencias contra su mujer, Begoña Gómez, por unos supuestos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Sánchez ya vinculó aquel día estas diligencias judiciales con la utilización de la justicia para desestabilizar a dirigentes políticos.
El presidente ha iniciado su comparecencia sin preguntas haciendo referencia a su carta del pasado miércoles, en la que cuestionaba si merecía la pena permanecer en su puesto a costa de la campaña que Sánchez considera que está sufriendo su familia. "Si aceptamos todos como sociedad que la acción política permita el ataque a inocentes, no merece la pena, si se permite el odio, la insidia y la falsedad, no merece la pena, si permitimos que las mentiras más groseras sustituyan el debate basado en evidencias, no merece la pena, por muy alto que sea, no hay honor que justifique el sufrimiento injusto de las personas que uno más quiere", ha asegurado.
Y sin embargo, el presidente se mantiene en La Moncloa. Sánchez ha dejado caer que, en los próximos meses, parte de su labor será la de conseguir "que la mayoría social se movilice en una apuesta por la dignidad y el sentido común, poniendo fin a la política de la vergüenza. Esto no va del destino de una persona, se trata de decidir qué tipo de sociedad queremos ser. Llevamos demasiado tiempo dejando que el fango contamine la vida pública. Si permitimos que la sinrazón se convierta en rutina habremos hecho un daño irreparable a nuestra democracia".
Sánchez ha dado su agradecimiento por la muestras de apoyo recibidas en los últimos días, especialmente por parte de sus compañeros socialistas, que en mayor o menor medida han influido en su decisión definitiva de permanecer en el cargo.
En su apelación a la "conciencia colectiva", Sánchez ha puesto en valor a una sociedad española "que desde el acuerdo generoso supo sobreponerse a las heridas del peor de sus pasados, que superó con éxito una pandemia, que a pesar del contexto de guerra vive un muy buen momento económico y respira paz social, una sociedad que asombró al mundo por su aceptación entusiasta de los derechos y libertades pasando de país oscuro a referente internacional". En este sentido, Sánchez ha pedido que España vuelva a ser "ejemplo e inspiración para un mundo convulso y herido", ya que "los males que nos acechan no son exclusivos de España".
Minutos antes de la comparecencia en la Moncloa en la que ha anunciado esta dimisión Sánchez se reunió con el Rey Felipe VI para darle a conocer su decisión. Tras su encuentro con el Jefe del Estado, Sánchez ha mantenido un encuentro con algunas de las personas que conforman su círculo de confianza, como los ministros Félix Bolaños y María Jesús Montero o el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, y su jefe de gabinete, Óscar López.
Cinco días de incertidumbre y hermetismo
Sánchez sorprendió incluso a sus colaboradores más cercanos el miércoles, cuando a última hora de la tarde publicó una extensa carta en Twitter en la que en la que se preguntaba si "merece la pena" mantenerse al frente del Ejecutivo a costa de la "estrategia de acoso y derribo" que afirma estar sufriendo tanto él como su mujer por parte una "organización ultraderechista" como Manos Limpias, que fue quien realizó la petición de las diligencias contra su mujer, y de una "constelación de cabeceras ultraconservadoras" que han estado publicando "informaciones espurias" sobre Gómez.
El hermetismo ha sido la tónica dominante de estos días hasta la resolución final de este lunes. Ni siquiera sus más próximos colaboradores parecían sabedores de la decisión de Sánchez. Estos cinco días de dudas, con la agenda del líder del Ejecutivo en suspenso, han desembocado en que todo sigue igual. Ni dimisión, algo que muchos dentro del PSOE veían muy factible, y por lo visto sin tampoco una cuestión de confianza que permitiera al Gobierno medir sus apoyos parlamentarios.
Apoyo de Yolanda Díaz, crítica de Ayuso
Las reacciones a la declaración del presidente del Gobierno han ido sucediéndose a lo largo de la mañana. En el PSOE ha predominado la euforia de todos sus dirigentes y, aunque el apoyo también ha sido claro desde el otro socio de coalición, Sumar, también su líder, Yolanda Díaz, ha dejado caer alguna crítica.
Minutos después de la comparecencia de Sánchez, Díaz ha manifestado su "respeto a la decisión del presidente", si bien ha asegurado que "no nos han votado para convertir nuestros problemas en los suyos". Ha aprovechado asimismo para animar al PSOE a cumplir la integridad del pacto de investidura entre ambos partidos e ir "más allá, profundizando en las transformaciones de este país para que la política vuelva a ser una solución para quien más lo necesita". Por otro lado ha exigido al líder de la oposición, el popular Alberto Núñez Feijóo, que "deje de cuestionar deje de cuestionar los resultados que salieron legítimamente de las urnas".
Por su parte, antes de la comparecencia del propio Feijóo ha hablado una de las grandes voces populares, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha criticado que "el presidente ha aprovechado cinco días para ver cómo podía atacar a los partidos y a la prensa independiente" y ha enmarcado el discurso de Sánchez en un paso más en su "máxima de conmigo o contra mí".