El Banco Central Europeo apunta a más recortes de tipos si la inflación sigue bajando
lunes, 16 de diciembre de 2024
Ha recortado los tipos de interés cuatro veces este año, y los inversionistas apuestan por mayor relajación de la política monetaria en 2025
Reuters
El Banco Central Europeo bajará aún más los tipos de interés si la inflación sigue disminuyendo hacia su objetivo de 2%, ya que restringir el crecimiento económico ya no es necesario, dijo el lunes la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
El BCE ya ha recortado los tipos de interés cuatro veces este año, y los inversionistas apuestan por una mayor relajación de la política monetaria en 2025, ya que la preocupación por la inflación ha desaparecido en gran medida y el anémico crecimiento económico es ahora una preocupación mayor.
"Si los datos entrantes siguen confirmando nuestra línea de base, la dirección a seguir está clara y esperamos seguir bajando los tipos de interés", dijo Lagarde en un discurso en Vilna.
Añadió que mantener los tipos a un nivel "suficientemente restrictivo" ya no estaba justificado dado el débil crecimiento y la moderación de las presiones sobre los precios, una pista que sugiere que el próximo objetivo es el llamado nivel neutral, que ni restringe ni estimula la economía.
Aunque neutro es un concepto vagamente definido, Lagarde afirmó en el pasado que los estudios del BCE lo sitúan entre 1,75% y 2,5%, lo que indica que podrían producirse varios recortes más del tipo de depósito de 3% antes de que se caliente el debate sobre el nivel neutro.
Los inversionistas financieros esperan que el BCE recorte los tipos en cada una de sus próximas cuatro reuniones y ven una probabilidad superior a 50% de que se produzca otro recorte antes de finales de año, lo que podría situar el tipo de interés oficial del BCE en la parte inferior de este rango neutral.
Una de las principales razones por las que la política podría relajarse tan rápidamente es que los últimos vestigios de inflación elevada están desapareciendo a medida que se controla la presión sobre los costes de los servicios, la mayor partida de la cesta de precios al consumo.
"El impulso inflacionista de los servicios también ha caído en picado recientemente", dijo Lagarde. "Estos datos sugieren que hay margen para un ajuste a la baja de la inflación de los servicios, y por tanto de la inflación nacional, en los próximos meses".
El crecimiento de los salarios, otra de las principales preocupaciones en el pasado, también muestra unas perspectivas más benignas, con el propio indicador de salarios del BCE apuntando a un crecimiento de 3% el próximo año, un nivel que por fin es coherente con el objetivo del BCE.
Según Lagarde, existen incluso algunos riesgos a la baja para la inflación, ya que los riesgos geopolíticos enturbian las perspectivas y el ya de por sí débil crecimiento podría verse afectado por nuevas perturbaciones.
"Si Estados Unidos -nuestro mayor mercado de exportación- da un giro proteccionista, es probable que el crecimiento de la zona euro se resienta", dijo Lagarde.