Energía

El factor chileno que explica en parte las multimillonarias pérdidas de OHL

En el país OHL enfrenta la revisión de contratos de construcción de tres obras

Expansión - Madrid

La situación de OHL ha empeorado a medida que ha avanzado el año y ha sido especialmente grave tras la salida del anterior consejero delegado, Juan Osuna, ahora primer ejecutivo de Aleatica, la antigua OHL Concesiones.

Osuna presentó a los inversionistas en mayo un plan de salvación de la constructora que, además de justificar la venta de las autopistas al fondo IFM por algo más de 2.158 millones de euros (US$2.443,1 millones), incluía una nueva hoja de ruta basada, en su opinión, en una cartera de construcción equilibrada en la que estaban incluidos los trabajos para la concesionaria vendida al grupo australiano, con márgenes que se movían entre el 5% y el 8%.

Hoy Aleatica, dirigida por Osuna a pleno rendimiento desde junio, cuando abandonó la constructora, es uno de los grandes problemas de OHL, ya que la concesionaria se ha convertido en un cliente inflexible con el grupo fundado por los Villar Mir.

Fuentes próximas a la compañía reconocen que una parte del ebitda negativo en el área de construcción de más de 300 millones corresponde a las pérdidas previstas en los trabajos que la empresa realiza para Aleatica en Latinoamérica.

Adicionalmente, OHL ha tenido que realizar un ajuste a la baja de la cartera de producción prevista por Osuna hasta junio, al no tener asegurados los contratos de varias concesiones con Aleatica que se encuentran en una fase poco avanzada de ejecución. Se trata de contratos con un presupuesto de 521 millones de euros que, sorprendentemente, la empresa indicó ayer que no están "formalizados".

En Chile, se encuentra en revisión el contrato de construcción de la terminal portuaria Valparaíso con un presupuesto de 175 millones de euros, el Puente Industrial por 145 millones y el Nuevo Camino Los Nogales por 119 millones.

En Perú, Aleatica también renegocia las obras de construcción del Evitamiento Chimbote (114 millones), que forma parte de la Autopista del Norte.

"Resulta, como mínimo, paradójico que proyectos considerados sanos y rentables por OHL en junio bajo la batuta de Juan Osuna se conviertan ahora en un quebradero de cabeza con Osuna como cliente al otro lado de la mesa", aseguran fuentes del sector concesional que, al mismo tiempo, valoran el ejercicio de transparencia y de prudencia llevado a cabo por el nuevo equipo gestor de la constructora.

TEMAS


OHL - Construcción - Transporte - Chile