El fiscal especial Mueller persiste aunque equipo de Trump dice que tiempo se agotó
martes, 4 de septiembre de 2018
Giuliani, abogado del presidente Donald Trump, sostiene desde hace semanas que el sábado 1 de septiembre era la fecha tope
Bloomberg
La investigación del fiscal Robert Mueller debería haber concluido –o al menos estar congelada desde hace dos meses-, si se le toma la palabra a Rudy Giuliani.
Giuliani, abogado del presidente Donald Trump, sostiene desde hace semanas que el sábado 1 de septiembre era la fecha tope conforme a las pautas del Departamento de Justicia para que Mueller concluyera su investigación sobre Rusia para evitar afectar de manera inapropiada las elecciones de mitad de mandato, que se celebrarán el 6 de noviembre. “Siempre pensé que ese era el día de tomar alguna decisión”, declaró el exalcalde de Nueva York en una entrevista.
Mueller ha respondido a los ultimátums de Giuliani con el silencio público que mantiene desde que fue designado en mayo de 2017 para encabezar la investigación sobre la interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016. Pero no hay indicios de que el fiscal especial vaya a guiarse por el reloj de Giuliani y no hay leyes ni políticas claras que le exijan hacerlo.
“La idea de que existe un plazo mágico es ridícula”, dijo Mimi Rocah, exfiscal federal de la oficina del procurador de los Estados Unidos en el Distrito Sur de Nueva York.
Prueba decisiva
Un pedido de entrevistar a Trump de aquí en adelante, dijo Giuliani, claramente estaría fuera de los límites prescritos, postura que podría obligar a Mueller a enviar una citación al presidente si quiere interrogarlo.
“Si nos envía una citación pondrá en marcha una batalla legal justo antes de la elección”, señaló. “No creo que vaya a hacerlo”.
Las próximas semanas podrían ser una prueba decisiva sobre la paciencia de Trump con Mueller… y el procurador general Jeff Sessions. Mueller fue nombrado después que Sessions se excusó de la investigación, medida que, según dijo Trump, fue débil y lo dejó desprotegido.
En la entrevista que concedió el jueves a Bloomberg News, Trump dijo que el puesto de Sessions está a salvo al menos hasta después de la elección de noviembre. Pero criticó duramente al procurador general por no controlar lo que denominó la “investigación ilegal” de Mueller.
Se espera que Mueller pueda encontrar el equilibrio en el conflicto en las próximas semanas, avanzando con las actividades de investigación que considere necesarias y al mismo tiempo cumpliendo con una política del Departamento de Justicia que establece que los actos evidentes destinados a influir en una elección deben evitarse.
Cómo mínimo, el equipo de Mueller seguramente abrirá un segundo procesamiento contra Paul Manafort, el ya condenado exdirector de campaña de Trump, más avanzado el mes en Washington. Y no hay impedimento para iniciar nuevos procesamientos, que, según la práctica del Departamento de Justicia, supuestamente deben dictarse cuando estén listos.
Si bien los fiscales podrían abstenerse de tomar medidas públicas contra un candidato que figura en la boleta electoral al acercarse el día de los comicios, pueden ser menos cautelosos cuando tratan con alguien que no es candidato en una elección… como Trump, dijo Rocah, exfiscal que ahora es una destacada profesora de la Escuela de Derecho Pace en materia de justicia penal.
“Con respecto a la investigación de Mueller, no creo que estemos hablando de alguien que vaya a estar en la boleta electoral”, señaló. “No es un plazo absoluto como pretenden presentarlo”.