El gobierno español quiere negociar el cierre de las nucleares antes de 2030
jueves, 15 de noviembre de 2018
Habrá cinco plantas de carbón que sobrevivirán
Expansión - Madrid
El secretario de Estado de Transición Ecológica, José Domínguez Abascal, ha puesto hoy fecha al cierre del parque nuclear en España. El Gobierno quiere que se produzca antes de 2030, una vez vencida la vida útil de las plantas, pero se abre a abordar un proceso "escalonado" y "de acuerdo" con las compañías, según afirmó a un grupo de periodistas tras intervenir en la XX Edición del Sector Gasista, organizada por EXPANSIÓN.
"Va a primar que fueron diseñadas para 40 años. Se podría prorrogar, pero no es lo que contemplamos. Lo que sí contemplamos es un cierre escalonado", afirmó el secretario de Estado a un grupo de periodistas. En 2021 vencen los cuarenta años de vida útil de Almaraz y en 2028, los de Trillo.
"Las nucleares tienen una fecha de diseño de 40 años, pero hay que hacerlo compatible con un cierre ordenado y con las capacidades que tenemos en España. Tiene que ser una oportunidad para la industria española en su actividad", afirmó. "Antes de 2030 habremos cerrado, pero luego viene un proceso que va a ir marcando la capacidad industrial y las condiciones de seguridad que marque el CSN", añadió.
Domínguez Abascal también auguró el cierre de todo el parque de carbón en pocos años. "Hay catorce plantas de carbón de las que nueve no han hecho las inversiones necesarias y deben cerrar antes de junio de 2020. Eso va a ocurrir. Quedarán exclusivamente cinco plantas más, que irán cumpliendo su vida, pero da la impresión de que difícilmente estarán mucho tiempo, dados los actuales precios", indicó durante la apertura de la jornada.
Las cinco plantas de carbón que sobrevivirán en un primer momento será las de As Pontes y Litoral (Endesa), Los Barrios (Viesgo), Aboño y Soto de Ribera (EDP). Son las que han realizado las inversiones en desnitrificación y en desulfuración requeridas por la normativa comunitaria. El resto tiene unas limitaciones a su operación de 1.500 horas al año, lo que pone en serios aprietos su viabilidad económica. Estos límites también se aplican a instalaciones industriales como las de Alcoa.
Posteriormente, explicó a los periodistas que, por la información que tiene de los operadores, a prácticamente ninguno "le salen las cuentas" en lo referido a la rentabilidad de las centrales de carbón. Iberdrola ha solicitado el cierre de dos centrales y Endesa está en trámites de hacerlo con otras dos.
En cuanto al gas, que se presenta como la pieza clave para lograr una transición energética hacia las renovables sin problemas de gestión, el secretario de Estado ha sido exigente. Tiene la virtud de ser gestionable y de que "España tiene una situación holgada en capacidades gasistas", pero "también tiene su reto de transición".
"Va a acompañar en los primeros años, pero si quiere seguir haciéndolo tiene que ser diferente, basado en renovables y en hidrógenos, para llegar a 2050 con cero emisiones", afirmó ante los representantes de esta industria.
La directora de EXPANSIÓN, Ana I. Pereda, destacó que España está "bien posicionada por su posición geográfica y modernas infraestructuras" para protagonizar una transición energética en la que el gas sirva de pieza clave. "El mercado de gas vive momentos de especial relevancia" y, "en un contexto en el que el mundo camina hacia transición energética", se presenta como un "elemento necesario para facilitar esta transición histórica" hacia fuentes medioambientalmente sostenibles.