El huracán Fiona provocó apagón y desborde de ríos dentro de Puerto Rico
lunes, 19 de septiembre de 2022
El ojo del huracán tocó costa en República Dominicana cerca de Boca de Yuma con fuerza intacta y vientos estimados en 150 km/h
El Observador - Montevideo
El huracán Fiona, que toco tocó tierra ayer en el sur de Puerto Rico, provocó un apagón general que afecto incluso a hospitales, además del desborde de ríos, pero sin alcanzar la fuerza del huracán María que devastó la isla hace justo cinco años y dejó casi 3.000 muertos.
Esta madrugada, el Fiona llegó a las costas de República Dominicana, anunció el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
El ojo del huracán tocó la costa de República Dominicana cerca de Boca de Yuma con una fuerza intacta y vientos estimados en 150 km/h, indicó en Twitter el NHC.
Fiona sumió ayer a todo el territorio portorriqueño en la oscuridad tras tocar tierra cerca de Punta Tocón (suroeste), según los informes de la misma agencia norteamericana de control de estos fenómenos.
El huracán ingresó con vientos de hasta 140 kilómetros por hora, consignó la agencia AFP, con categoría 1, la más baja de las cinco en la escala de Saffir-Simpson, pero se espera que "se fortalezca aún más en las próximas 48 horas", indicó el NHC.
La Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico, la corporación pública a cargo de la generación de electricidad, consiguió reiniciar varios generadores, un primer paso hacia el restablecimiento de la red eléctrica.
Según los protocolos establecidos, en primer lugar se restablecerá el servicio a hospitales y otros edificios gubernamentales que ofrecen servicios esenciales.
El río Grande de Loiza y el río Cagüitas, en el norte y centro de la isla, se desbordaron en algunas áreas, informó en Twitter el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, que recomendó a la población ribereña moverse a lugares altos.
Según medios locales, otros ríos se desbordaron en el sureste de la isla, inundando carreteras y zonas urbanas, y en la montaña y la zona suroeste, varias familias perdieron el techo de sus casas por las ráfagas de vientos y tuvieron que cobijarse en refugios habilitados por el gobierno.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, anunció la suspensión de las clases en las escuelas este lunes, ante pronósticos de que las lluvias continuarán.
También decretó un asueto administrativo para los empleados gubernamentales, excepto aquellos que ocupan puestos críticos o que proveen servicios esenciales durante la emergencia.
El presidente estadounidense, Joe Biden, aprobó el mismo domingo la declaración del estado de emergencia en Puerto Rico, una medida que permite liberar fondos federales para las labores de ayuda.
La antigua colonia española se convirtió en territorio estadounidense a fines del siglo XIX antes de obtener el estatus de estado libre asociado en 1950.
Las autoridades anticipan lluvias de 508 a 635 milímetros en áreas aisladas de Puerto Rico, una cantidad bastante inferior a las cerca de 1.016 milímetros registradas durante el huracán María, que azotó el territorio caribeño hace casi cinco años.
"Podemos esperar que haya estragos, pero no al nivel de María", dijo Ernesto Morales, del NWS, en la misma rueda de prensa que el gobernador.
A raíz de María, Puerto Rico quedó incomunicado y grandes áreas estuvieron sin electricidad durante meses y unas 3.000 personas murieron a consecuencia del desastre, según el balance oficial.
Fiona ya causó graves daños a su paso por Guadalupe el viernes por la noche.
En algunos lugares, el agua subió a más de 1,50 metros en ese territorio francés. Un hombre murió allí, arrastrado con su casa por la crecida de un río.
El calentamiento de la superficie de los océanos aumenta la frecuencia de los huracanes más virulentos, con vientos más fuertes y lluvias más intensas, según expertos.