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El Nobel que murió sin ver su sueño de paz en Oriente Medio

Reuters

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El estadista más laureado de Israel ganó reconocimiento a nivel mundial y un Premio Nobel de la Paz como un símbolo de esperanza en una región asolada por guerras avivadas por profundas divisiones religiosas y políticas.

Nacido en 1923 en lo que actualmente es Bielorrusia, emigró una década más tarde a la Palestina gobernada por Gran Bretaña. Peres controló compras de armas y mano de obra en la fuerza de choque sionista Hagana antes del establecimiento de Israel.

En una carrera política de casi siete décadas, Peres formó parte de una decena de gabinetes y fue dos veces primer ministro de Israel de la mano del Partido Laborista, aunque nunca ganó una elección general en cinco intentos entre 1977 y 1996.

En este último, fue vencido por Benjamin Netanyahu por menos de 30.000 votos. Sin embargo, entre 2007 y 2014 fue presidente de Israel, un puesto mayormente ceremonial.

El estadista compartió el Nobel con el asesinado primer ministro Isaac Rabin y el fallecido líder palestino Yasser Arafat por alcanzar en 1993 un acuerdo de paz interino que nunca se fortaleció como un tratado duradero.

Se le adjudica que Israel haya conseguido una capacidad nuclear al obtener el reactor secreto Dimona de Francia durante su paso por el Ministerio de Defensa en la década de 1950. 

Peres era visto en el exterior como un diplomático sofisticado, pero en Israel, la nación que ayudó a forjar después de la guerra, era percibido como un ególatra manipulador.