El Parlamento británico hace descarrilar el Brexit que lidera Boris Johnson
martes, 22 de octubre de 2019
Los diputados impiden la tramitación urgente de la Ley de salida de la UE, lo que exigirá una prórroga.
Expansión - Madrid
La Cámara de los Comunes ha asestado un golpe casi definitivo al plan de Boris Johnson para implementar el Brexit el próximo 31 de octubre, al votar contra la tramitación exprés de la Ley que regula los términos del divorcio con la UE.
En una ajustada votación, por 322 votos a 308 votos, los diputados rechazaron la propuesta de Downing Street de realizar en apenas una semana todo el escrutinio de la norma por parte del Parlamento, para que pudiera ser sellada por la Reina Isabel II antes de fin de mes.
Casi toda la oposición, junto a algunos de los parlamentarios que fueron echados del grupo conservador por Johnson y a los del Partido Unionista Irlandés (DUP), se pronunciaron contra ese procedimiento urgente, alegando que la Ley requiere un análisis y debate más sosegado.
Tras la votación, Johnson ha acusado a la Cámara de votar por "seguir retrasando" el Brexit, en lugar de pasar página con este acuerdo. En este escenario, el Gobierno anunció su decisión de frenar la tramitación de la Ley, acelerar los preparativos para un Brexit caótico al final de mes, mientras aguarda a que Bruselas decida si concede una prórroga.
El pasado fin de semana, el Parlamento forzó a que Johnson pidiera una extensión, al menos hasta el 31 de enero de 2020, si no había acuerdo aprobado para el 31 de octubre. Sin embargo, el primer ministro no está dispuesto a negociar los términos de la extensión. Si se concede el retraso, Downing Street quiere utilizarlo para celebrar unas elecciones generales, con el objetivo de lograr una mayoría del Parlamento que le permita sacar adelante su plan del Brexit, aunque sea en una fecha más tardía.
Antes de la votación sobre la rapidez del proceso, los Comunes habían aprobado, por 329 a 299 votos, el primer análisis de la Ley. El texto todavía tiene que ser enmendado y votado de nuevo por Lores y Comunes antes de poder incorporarse a la legislación británica. Al no hacerse de manera urgente, este proceso puede durar alrededor de un mes. Si Johnson decide reanudar su tramitación y sigue este proceso, podría bastar una extensión "técnica" de unas semanas para formalizar el Brexit en noviembre o diciembre.
Si el borrador sigue adelante con su análisis parlamentario, todavía quedan otros obstáculos por el camino. La oposición prevé lanzar varias enmiendas, alguna de las cuales puede tener éxito. Los laboristas quieren proponer el mantenimiento de Reino Unido dentro de la unión aduanera tras el Brexit, algo que no contempla el plan negociado por Johnson. También hay una parte del Parlamento que quiere condicionar la aprobación de la Ley a que el plan de salida sea sometido a un referéndum.