El plan económico de Bolsonaro incluye privatizar a Petrobras y reducir ministerios
martes, 30 de octubre de 2018
La agenda económica del nuevo presidente incluye rebajar los impuestos a las empresas
Sebastián Montes
La elección del candidato ultraconservador Jair Bolsonaro ha sido una de las más polémicas en la historia de Brasil. No solo sus declaraciones de apoyo hacia la dictadura militar (1964-1985) o su intención de permitir el porte de armas a la ciudadanía han causado revuelo, sino que sus propuestas económicas también lo han hecho, sobre todo su intención de privatizar “la mayor parte” de las empresas estatales, entre las que se encuentran la compañía petrolera Petrobras y la firma eléctrica Eletrobras.
La petrolera se vio involucrada en el caso ‘Lava Jato’, considerada la mayor trama de corrupción que se ha visto en Brasil. Justamente, el factor de la desconfianza del electorado ante la corrupción de los gobiernos de izquierda fue uno de los factores determinantes para la victoria de Bolsonaro, además de una percepción que arroja falta de esfuerzo de las administraciones de Dilma Rousseff y Michel Temer para solucionar la crisis económica que atravesó el país hace cuatro años, afectado por los precios de las materias primas, lo que dejó al PIB del segundo trimestre del año 6% debajo de la cifra del primer trimestre de 2014, según comentó el economista principal de Ostrum Asset Management, Philippe Waechter.
El experto también aseguró que “la economía brasileña sigue siendo muy inestable” y agregó que las últimas encuestas sugieren que “el riesgo de recesión sigue siendo alto”.
Para contribuir a la mejoría de la estabilidad de la economía, el nuevo mandatario no fijará un objetivo para el tipo de cambio del real brasilero, aunque sí buscará que sea “más predecible”, según anunció su futuro jefe de gabinete, Onyx Lorenzoni.
Los impuestos son prioridad
El programa económico de Bolsonaro también plantea modificaciones importantes en los impuestos de la nación, las cuales incluyen la reducción de la carga tributaria de las empresas de 34% a 15%; la unificación de cinco impuestos en uno para gravar los bienes y servicios y el aumento del impuesto a las personas jurídicas de 17,5% a 20%, según fuentes oficiales.
Los planes del presidente electo también incluyen la reducción de ministerios de 29 a 15 en total, además de la implementación de un impuesto de 20% a los dividendos y una reducción de la deuda pública a 20% como algunos asuntos de mayor prioridad.
El doctor en Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, Jerónimo Ríos, dijo que las medidas que planea Bolsonaro “pueden responder a una solución estrictamente general para reducir al máximo el tamaño del Estado y ampliar el del mercado, lo que implica privatizar, desregular y mercantilizar”.
En la agenda de Bolsonaro también está la necesidad de tramitar una reforma pensional, tal como lo intentaron de manera infructosa sus antecesores. En este momento, 40% de todo el gasto público federal va dirigido allí, por lo que se ha hablado de imponer una edad mínima de pensión, inexistente en el sistema brasilero.
Mientras que Bolsonaro no quiere adoptar la reforma del sistema de seguridad social de Temer, analistas de Fitch Ratings opinan que un cambio en este aspecto debe efectuarse con prontitud al considerarla una de las medidas más urgentes para la consolidación del déficit del país. Además, la firma sostiene que “sin una reforma fiscal estructural sostenida, la dinámica de la deuda fiscal y del gobierno empeorará”. Fitch también destaca que la deuda bruta del gobierno general aumentará para acercarse a 80% del PIB en 2018 y continuará aumentando en 2019-2020.
En la agenda comercial según Paulo Guedes, quien posiblemente será su ministro de Economía, el Mercado Común del Sur (Mercosur), no está “entre sus temas de mayor importancia”. Los analistas de la calificadora creen que el crecimiento del PIB real está mejorando, pero es probable que se mantenga un poco más de 1% en 2018 y que suba a 2,2% y 2,7% en 2019 y 2020, respectivamente, dejando atrás dos años de recesión que aún siguen pesando en la mayor economía de América Latina.
El Bovespa presentó bajas tras los comicios
Durante la jornada de ayer, el índice Bovespa mostró una reducción de 2,43% tras ubicarse en 83.629,20 unidades al cierre, pese a tener un comportamiento al alza durante las primeras horas del día, que mostraban una escalada de 3,1%. Mientras tanto, el real se devaluaba 0,55% por ciento, a 3,68 unidades por dólar en las horas de la tarde. Según información de Reuters, los papeles líderes y las acciones de estatales, que habían aportado el grueso del alza, figuraban entre los componentes de mayor declive.