“Vamos a garantizar el pago de la deuda al FMI sin que ello suponga más inflación"

Mañana en Argentina, dos candidatos opuestos se disputarán las elecciones presidenciales. El balotaje está entre Javier Milei, un libertario del partido La Libertad Avanza y el actual ministro de Hacienda del país, Sergio Massa. Mientras Milei representa el cambio y a las fuerzas juveniles, Massa, quien fue el más votado en primera vuelta, es continuismo.

Lo cierto es que mientras el electorado argentino decide, en el país ya hay algo claro y es que el que llegue, deberá apostarle, como medida prioritaria, a “sanar” la economía, hoy, en estado crítico. Argentina cuenta con una inflación anual de más de 140%, una pobreza que llega a 40% de la población y una grave sequía con pérdidas de hasta 50% en los cultivos.

Sobre cómo resolver estos puntos urgentes de la economía argentina, el candidato Sergio Massa, habló para LR.

Si triunfa en las elecciones del domingo, ¿cuáles son sus primeras medidas económicas?

Argentina tiene dos grandes anclas de su economía que tiene que resolver, una coyuntural y una estructural. La coyuntural es la peor sequía de su historia, Argentina arrancó el año con una proyección de exportaciones que se vio recortada en US$21.000 millones básicamente por la sequía. Y las órdenes de compra y de producción estaban enfocadas en el tamaño de una economía que iba a exportar US$100.000 millones. Por otro lado, Argentina tiene un endeudamiento criminal. El peor crédito en términos de tamaño que se tomó hace algunos años nos deja en una situación difícil porque tenemos una acreencia y un programa al que ir dando respuesta y que lo tenemos que discutir con sensatez, y apostando a que el programa esté asociado al crecimiento y al desarrollo.

¿Qué responde cuando señalan que usted representa la continuidad política con el “peronismo"?

Me parece un error plantear que la etapa que viene sea vinculada solo al peronismo. Haremos un gobierno de unidad.

¿Cuáles son las proyecciones en su primer año de mandato?

El año que viene la economía argentina y las exportaciones van a crecer de manera sideral entre otras cosas porque pasaremos a tener un saldo positivo en nuestra balanza energética porque nos vamos a recuperar de la sequía y potenciar la capacidad de exportación. Eso nos va a dar mucha libertad para ir eliminando restricciones distorsivas. Vamos a intentar que el Estado tenga mayores signos de austeridad.

Sin duda, el “cáncer” de Argentina es la inflación, ¿qué medidas tomará para controlarla?

Vamos a tener US$40.000 millones más de exportaciones el año que viene y US$7.000 millones menos de vencimientos del Fondo Monetario Internacional, una diferencia abismal. Vamos a garantizar pagarle al FMI sin que ello suponga un programa que provoque inflación en la Argentina. La clave para no ser vulnerables es blindar el esquema de reservas y para eso voy a integrar la mitad del directorio del banco central con oposición.

¿Cuál será su apuesta en materia de política exterior?

Lo que el mundo espera de la Argentina es equilibrio, racionalidad, sentido común. Mis dos agendas están enfocadas en trabajo para venderle al mundo y lucha contra la inseguridad para vivir en un país con paz y orden. Además, para mí es fundamental el cambio en el sistema del servicio exterior argentino. No quiero embajadores que coman sándwiches en los cócteles, sino que hagan negocios y traigan resultados para nuestras empresas.

Y en apuestas concretas...

En apuestas concretas, es de interés económico de la Argentina profundizar la relación con Marruecos, con Egipto, con África del Sur. Allí se está dando un proceso de extensión de la frontera agrícola en algunos de esos países, y la tecnología y la industria. Por otro lado, creo además que con Uruguay, Brasil, Argentina y Paraguay tenemos una enorme oportunidad si integramos y competimos juntos en el mercado de proteínas.

¿Qué pasará en su gobierno con Mercosur?

Quiero aprovechar para contarle a los argentinos qué significa el delirio de romper el Mercosur en términos de industria automotriz. Por ejemplo, significa perder 150.000 puestos de trabajo. Además de industria agroforestal, representa la pérdida de 68.000 puestos de trabajo para el arroz. Digo porque a veces en las campañas se dicen frases que suenan para los electorados simpáticas, diciendo voy a romper con China, voy a romper con Brasil, sin mirar que en términos económicos la destrucción de 400 o 500.000 empleos en diferentes sectores.

Una de las críticas a sus propuestas es la de los subsidios, ¿los mantendrá?

El presupuesto argentino tiene un paquete de beneficios tributarios y presupuestarios centrados a sectores económicamente muy concentrados. Nosotros en términos de eliminación de subsidios lo que venimos haciendo es quitarles los subsidios a quienes no lo necesitan, pero protegérselos a quienes sí. Un trabajador argentino pagaría 10 veces más el boleto de tren si se quita el subsidio.

¿Cómo están las reservas internacionales de Argentina?

Para fortalecer las reservas argentinas, vamos a ampliar el programa de fortalecimiento exportador a todas las actividades, bienes intermedios o terminados, productos primarios y servicios; va a tener por los próximos 30 días un régimen de liquidación, 70% ingresado por lo que se denomina el mercado único libre de cambios, 30% ingresado por el sistema de dólares financieros o contado con liquidación.

¿Qué hará respecto a la deuda soberana?

Argentina hizo un pésimo canje de deuda a tal punto que es el único en la historia económica mundial que al día siguiente que se terminó cayó el valor de los bonos en lugar de subir. Vamos a estudiar mecanismos de premio y anticipación de pagos en algunos bonos argentinos para garantizar que recuperemos profundidad y confianza en el mercado soberano de bonos.