Globoeconomía

Emergencia económica de Maduro no corrige el rumbo de Venezuela

Carlos Rodríguez Salcedo

Los hechos suceden en medio del aumento de las protestas de la oposición en el último mes y medio y luego de que se renovara el decreto de emergencia económica, medida con la que Maduro intentó una salida a la crisis en enero de 2016.

 El opositor Henrique Capriles denunció ayer que le llegó información de que la Guardia Nacional utilizará a los llamados colectivos para endurecer la contención de las manifestaciones, en una fase que llamó de “más represión”.

16 meses después del primer decreto de emergencia económica, la inflación, el desempleo y la situación de la industria siguen sin despegar. Según los sondeos de la Asamblea Nacional, la inflación en el primer trimestre se ubicó en 65,5% y los pronósticos del Fondo Monetario Internacional  apuntan a que el dato llegue a 720% al finalizar 2017. 

Todos son indicadores con tendencias a la baja que no han logrado ser corregidos con la emergencia económica dictada por Maduro. Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, aseguró que estas medidas de contención han demostrado que no responden las necesidades puntuales de la población. 

Un panorama al que se le suma el cierre de los canales diplomáticos en organismos que, incluso, en el pasado eran favorables para Venezuela. 

Pese a que Rodríguez aseguró que es difícil que el Consejo de Seguridad de la Onu vaya más allá de una declaración, pues Rusia y China tienen derecho a veto y aún mantienen buenas relaciones con Venezuela, sí ha habido espacios como la Celac, la OEA y, posiblemente, la Unasur donde las fichas juegan en contra. 

Para Rodríguez, la diplomacia petrolera de Venezuela ya no funciona. “Hay un desgaste interno pero también en la de política exterior”, dijo el experto. Por esto, los países caribeños no lograron imponerse para emitir una declaración en la Celac y Argentina, Brasil y Perú ahora son más críticos.