Globoeconomía

Escocia se quedaría con US$92.500 millones del petróleo si gana el “sí” en referendo

Fermina Salaverría

Los movimientos separatistas en Escocia frente al Reino Unido son un espejo de los que se vienen dando en Cataluña, España. Pero eso no es todo, pues las implicaciones económicas que podrían recaer sobre los países si estas regiones se llegaran a desmembrar también son comparables.

El año pasado Cataluña aportó 18,8% del Producto Interno Bruto (PIB) de España, siendo la comunidad con más peso en este total, según cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, según datos de la analista comercial C-Intereg, Cataluña es la comunidad española que más exportó en 2011 (representando 26,5% del conjunto nacional), siendo los principales sectores de exportación los productos químicos y los equipos.

Mauricio Jaramillo Jassir, internacionalista de la Universidad del Rosario, dijo que las consecuencias económicas para España serían fortísimas si perdiera Cataluña. “El país se vería más amenazado por las crisis económicas que ya le afectan al compartir moneda con los demás países de la Unión Europea. Los inversionistas también saldrían despavoridos por el efecto del riesgo de contagio”.

Respecto a la independencia de Escocia, el principal factor económico que entraría en juego para el Reino Unido son los actuales ingresos que obtiene de los fondos de petróleo y gas que se extraen del Marte del Norte. Estimaciones del Gobierno escocés prevén que a 2018 los ingresos fiscales en torno a este servicio ascenderán a US$92.457 millones. El Office for Budget Responsability (OBR) de Escocia también ha calculado que quedan entre 30 y 40 años de producción en este territorio (lo que equivale a alrededor de 24.000 millones de barriles de petróleo).

Geovanni Reyes, docente de economía de la Universidad del Rosario, comentó acerca de la importancia que supone Escocia para el Reino Unido. “A Escocia le pertenecen 200 millas marinas de las cuales se genera la producción petrolera. Además, por ser un país con armas nucleares, se le concede un tratamiento preferencial”.

Así mismo, si se llegara a independizar se arriesgarían 11.000 empleos del programa nuclear de la base naval de Faslane, según representantes del parlamento escocés.