Este es el ranking de los bancos centrales que ya anunciaron tasas de interés en 2023
martes, 7 de febrero de 2023
Emisores como el de Brasil y la Fed de EE.UU. son los que tienen actualmente los tipos de interés más altos. En el segundo semestre se espera una relajación
La primera semana de febrero se vio marcada por los nuevos anuncios de los principales bancos centrales respecto a sus tasas de interés.
De los que ya han reportado, el Banco Central de Brasil (BCB) es el que tiene una de las tasas más altas con 13,75%, fijada en su última reunión, en la cual mantuvo el nivel. Le sigue la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés), con 4,75% de tasa fijada; continúa el Banco Central de Canadá, con 4,5%; el Banco de Inglaterra (BOE), con 4%; y el Banco Central Europeo (BCE), con 3%.
En otro tanto, entre los que han reportado este año y los que aún no, el ranking lo conforman el Banco Central de la Federación de Rusia, que pese a tener una tasa considerable de 7,5%, ha elegido seguir una línea de política monetaria expansiva, reduciendo sus tasas desde mediados de 2022 y manteniéndola en los últimos meses. El Banco de Reserva de la India actualmente tiene una tasa de 6,25% y el próximo 8 de febrero se conocerá la nueva tasa que fijarán. Le sigue la Fed, el Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra con 4% de tasa . Continúan El Banco Nacional de Suiza (1%) y el Banco de Japón (-0,10%), algunos de los que tienen las tasas más bajas en la actualidad.
A diferencia de la tendencia alcista que se venía presentando en los últimos meses, los analistas proyectan que en el primer semestre de 2023 el incremento de tasas empezaría a desacelerarse, lo que quiere decir que la economía estaría llegando a la senda de normalización de los niveles de inflación.
Esto se podría evidenciar con la última decisión de la Fed en la que decidieron aumentar la tasa tan solo en 25 puntos porcentuales, ubicándola en un rango de 4,75%. El BCE también hizo su respectivo anunció y dio a conocer un aumento de 0,5 puntos porcentuales, ubicándose en un rango de entre 2,5% y 3,25%; y asegurando que podrían tener un aumento similar en marzo.
En Colombia, también se ha utilizado esta estrategia, en la última junta el Banco de la República la ubicó en 12,75%.
Hay que resaltar que, el aumento de las tasas de interés se adoptó en la mayoría de países a nivel internacional como un instrumento para atajar los niveles de inflación, los cuales registraron niveles históricos, especialmente durante 2022.
“Una tarea fundamental de los Bancos Centrales independientes es luchar contra la inflación. “Lo que estamos viendo a nivel mundial son medidas para atender ese incremento generalizado de precios”, explicó Carlos Sepúlveda, profesor de la Facultad de Economía en la Universidad del Rosario. Lo que dicen los expertos es que, a medida que aumentan las tasas, se incrementa el precio del dinero, siendo más difícil adquirir créditos, disminuyendo el consumo y por ende la demanda agregada; reduciendo así las expectativas inflacionarias. Cebe resaltar que además del control de la inflación, el cambio de tasas responde a ciclos de aumento. Esto se ve, por ejemplo, en cómo el BCE venía manejando un registro continuo de tasas de 0% hasta 2022. “Muchos bancos ya llevan más de un año en ciclos de aumentos de tasas, entonces la prioridad empieza a ceder un poco, terminando el ciclo de aumentos de tasas”, explicó Gregorio Gandini, fundador de Gandini Análisis.
A nivel global, los bancos centrales tienen como referencia el comportamiento de las tasas de la Fed. “En la medida que la Fed aumente las tasas de interés, los capitales tienen un mejor retorno, e ingresan al mercado norteamericano, fortaleciéndose el dólar. Esto, en últimas impacta en la devaluación de las monedas”, explicó Oliver Pardo, director del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana. Para los mercados emergentes como América Latina, el comportamiento de tasas de la Fed incide en otros factores como el encarecimiento de la deuda. Andrés Pardo Amézquita , ex viceministro de Hacienda y Crédito Público, explicó que “en la región estamos viendo tasas más altas que en Europa y Estados Unidos. Esto tiene un impacto en la desaceleración de las economías emergentes”.
Otro aspecto a analizar es que aún con el incremento de las tasas, la inflación no termina de relajarse en algunos países. Esto se explica por el choque en la oferta que significaron coyunturas como la crisis logística y la guerra entre Rusia y Ucrania.
“El aumento de tasas lo que hace es atacar el consumo, pero el choque actualmente es de oferta. Escasearon productos debido a los conflictos geopolíticos. Utilizar las tasas es una posible solución, pero no ataca el problema general”, aseveró Andrés Jaramillo, asesor financiero. Sin embargo, es posible que este semestre se sigan desacelerando y terminen los incrementos.