Expectativas de inflación en EE.UU. se mantuvieron estables en agosto, según la Fed

Las expectativas de inflación de los consumidores estadounidenses se mantuvieron mayoritariamente estables en agosto, pero los hogares están más preocupados por sus finanzas y más pesimistas sobre el mercado laboral, según una encuesta del Banco de la Reserva Federal de Nueva York.

La mediana de las expectativas de inflación a un año aumentó ligeramente el mes pasado a un 3,6%, desde el 3,5% en julio, informó el lunes la Reserva Federal de Nueva York. Las expectativas sobre cuál será la inflación en el horizonte de tres años disminuirán de 2,9% a 2,8%. Y las perspectivas de inflación en cinco años subieron de 2,9% a 3,0%.

Hubo cambios más notables en la forma en que los consumidores veían sus finanzas. “Tanto las percepciones sobre las condiciones crediticias actuales como de las expectativas sobre las condiciones futuras se deterioraron”, dijo la Reserva Federal de Nueva York en un comunicado.

Los encuestados dijeron que pensaban que era más probable que la tasa de desempleo fuera más alta dentro de un año. Las probabilidades percibidas de perder el empleo durante el próximo año aumentarán 2 puntos porcentuales hasta 13,8%, la lectura más alta desde abril de 2021. Las probabilidades de cambiar de trabajo voluntariamente durante el próximo año aumentarán 1,9 puntos porcentuales en agosto hasta un 18,9%. Los incrementos para ambas preguntas fueron mayores para las personas con educación secundaria o menor y un ingreso anual inferior a US$50.000.

Preocupación crediticia
Los consumidores están cada vez más preocupados de su capacidad para acceder al crédito, y la proporción de hogares que dicen que ahora es mucho más difícil o algo más difícil acceder al crédito en comparación con hace un año ha aumentado al nivel más alto desde que comenzó la encuesta en junio de 2013. También dijeron que esperan que sea más difícil adquirir un crédito durante el próximo año.

Los banqueros de la Fedon aumentaron significativamente las tasas de interés durante los últimos 18 meses y en julio elevaron su tasa de referencia al nivel más alto en 22 años en un esfuerzo por enfriar la demanda y controlar la inflación. Esas tasas más altas aumentan los costos de endeudamiento y pueden hacer que los bancos restrinjan el acceso a préstamos y otros créditos.

A medida que la inflación se enfría, la autoridad monetaria está desacelerando el ritmo de sus aumentos de tasas y se espera que en su próxima reunión, que se llevará a cabo de 19 al 20 de septiembre, deje su tasa de referencia sin cambios en un rango objetivo de 5,25% a 5,5%. Una actualización sobre los precios al consumidor previsto para el miércoles ayudará a fundamentar su decisión.

Alentados por las señales de que las presiones sobre los precios y el mercado laboral se están enfriando gradualmente, los banqueros de la Reserva Federal están decididos a no desperdiciar su oportunidad de lograr esquivar un “aterrizaje suave” por un aumento excesivo de las tasas de interés , incluso cuando siguen comprometidos con su objetivo de llevar la inflación de regreso a su meta del 2%.