FedEx sufre un golpe de US$1.000 millones por los aranceles que afectan al negocio

FedEx espera un impacto de US$1.000 millones debido a la volatilidad comercial este año, lo que subraya el impacto de los aranceles del presidente Donald Trump y la pérdida de una exención clave para bienes de bajo valor.

La mayor parte de esa reducción en el beneficio operativo ajustado se debe a la disminución de los envíos desde China a EE.UU., una ruta marítima muy rentable que se ha visto gravemente afectada por los aranceles. Aproximadamente US$300 millones se deben al mayor coste del despacho de aduanas, según John Dietrich, director financiero de FedEx.

El costoso entorno comercial “será un desafío para nosotros a medida que avanzamos”, dijo Dietrich en la conferencia telefónica sobre ganancias trimestrales de la compañía el jueves por la noche.

Este recuento es el último en mostrar cómo la guerra comercial de Trump está afectando las ganancias corporativas. También destaca cómo las empresas están comenzando a digerir las consecuencias de las nuevas barreras comerciales, después de meses de fluctuaciones políticas volátiles que empañaron sus perspectivas para el año.

La empresa de paquetería con sede en Memphis reanudó sus previsiones financieras, afirmando que sus ingresos crecerán entre 4% y 6% en el ejercicio fiscal actual, superando las estimaciones de Wall Street. Prevé que las ganancias ajustadas para el ejercicio fiscal 2026 se sitúen entre 17,20 y 19 dólares por acción, situando su punto medio ligeramente por debajo de las estimaciones promedio de los analistas.

La empresa de mensajería había omitido previamente una perspectiva para todo el año, alegando su incapacidad para predecir cómo las erráticas políticas arancelarias de Trump influirían en la demanda. El pronóstico asume que no se producirán nuevos cambios negativos en la dinámica del comercio mundial.

A pesar de la continua presión comercial, la mayor claridad aportada por la reinstauración de las directrices ofreció cierto alivio a los inversores. Las acciones de FedEx subieron menos de 1% a las 9:33 a. m. del viernes en Nueva York. La acción ha caído más de 19% este año, en comparación con el avance del 13% del índice S&P 500.

“Los aranceles son un poco ruidosos, pero son reales”, dijo Chris Ballard, director general de Check Capital Management. “Si miramos a corto plazo, fue un poco mejor de lo esperado”.

Cambio de política

La compañía continúa lidiando con el fin de una política comercial de larga data el 29 de agosto que permitía que paquetes con un valor inferior a US$800 ingresaran a Estados Unidos libres de impuestos, lo que pone en duda la composición de las rutas comerciales globales.

FedEx suele considerarse un predictor del rumbo de la economía en general debido a sus conexiones con empresas de los sectores de consumo e industrial. A medida que se acerca la importante temporada de compras y envíos navideños, las expectativas de la empresa de mensajería son un potente indicador de cómo terminará la economía el año.

En las últimas semanas, los analistas de Bank of America rebajaron la calificación de FedEx y de su rival, United Parcel Service, al predecir que los cambios en el de minimis provocarían una demanda deslucida durante las fiestas. FedEx declaró el jueves que se muestra "cautamente optimista" sobre la temporada.

FedEx recompró acciones por valor de US$500 millones durante el primer trimestre. La compañía prevé continuar recomprando acciones durante el resto del ejercicio fiscal.

La empresa de logística también está trabajando en iniciativas internas para reducir costos, incluyendo la fusión de sus redes aéreas y terrestres, históricamente separadas. FedEx espera que sus esfuerzos generen reducciones de costos permanentes por valor de mil millones de dólares.