Globoeconomía

Fuga de capitales en Chipre no se frenaría con el rescate

Mario Chaves Restrepo

Mientras la troika llegó a un acuerdo sobre el rescate a Chipre por €10.000 millones (US$13.000 millones) gracias a una reestructuración del sistema financiero, los gerentes de cartera de Aletti Gestielle SGR SpA, Fidelity Investments y Sanlam Private Investments dijeron que el país necesitará más apoyo y que el paquete de ayuda podría producir una fuga de capitales que llevaría a la isla a reformar su economía.

Tras más de 12 horas de intensas negociaciones y a solo 24 horas de que se cumpliera el plazo dado por el Banco Central Europeo  (BCE) para cortar el suministro de liquidez a los bancos, se logró un acuerdo que protege a los pequeños ahorradores, pero impone un nuevo modelo de rescate.
Lo pactado obliga al Gobierno a reestructurar el Banco de Chipre (BoC), la principal entidad del país y a cerrar el Laiki, el segundo de la isla. Quienes sufrirán las consecuencias de la reforma serán los depositantes de más de €100.000. Lo que se hará es transferir los depósitos menores a  esta cifra del Laiki al BoC para crear un “buen banco” y los mayores a €100.000 de ambas entidades serán congelados y utilizados para resolver las deudas y hacer la recapitalización. 
Estas condiciones no tendrán que pasar por el Parlamento chipriota, que la semana pasada rechazó las condiciones impuestas por la troika, ya que gracias a que los diputados aprobaron una ley que permitía reestructurar el sistema financiero no se necesitará su visto bueno de nuevo, sin embargo, todavía persiste el escepticismo. 
“El acuerdo será un nuevo comienzo para el país, pero no la última ayuda que va a necesitar”, dijo Fabrizio Fiorini, director de inversiones de Aletti Gestielle en Milán. “No creo que este sea el fin de la cuestión porque es muy difícil imaginar cuál será el futuro de Chipre en caso de que se produzca una fuga de capitales. Chipre tardará años en recuperar la fuerza”. 
Chipre, que representa el 0,2% de la economía de la zona euro, es el quinto país que pide un rescate después de que lo hicieran Grecia, Portugal, Irlanda y España. No obstante, las condiciones impuestas se constituyen en las primeras de este tipo en la zona euro, pues los bonistas senior sufrirán pérdidas.
El jefe de ministros de Finanzas del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, abrió la puerta para que este modelo de rescate se aplique a otros países y  aseguró que las naciones con grandes industrias bancarias deben mirar hacia la reestructuración y reducir su tamaño total.
Chipre había intentado aminorar el impacto del rescate para los grandes depositantes de sus bancos. Incluso el presidente  Nicos Anastasiades luchó  por preservar el modelo de negocios del país como un paraíso fiscal en el acuerdo.
Lo cierto, es que con lo aprobado, Chipre evitará un default soberano gracias a que con el modelo se prevé un recaudo de alrededor de €4.200 millones.
“Aun con el acuerdo, sigue siendo muy probable que Chipre reestructure su deuda en los próximos años”, puntualizó Nick Eisinger, analista de deuda soberana de Fidelity Investments. 
Las bolsas respondieron con caídas
Aunque las principales bolsas abrieron al alza tras conocerse el acuerdo, rápidamente volvieron a caer luego de que Dijsselbloem asegurara que el rescate a la isla es un nuevo modelo para resolver los problemas financieros de los países de la zona euro. Wall Street cerró la jornada de ayer con pérdidas: el Dow Jones cayó un 0,44% hasta los 14.447,75 puntos, mientras que el S&P restó un 0,33%. En Europa los índices más perjudicados fueron el Ibex, que cayó 1,64%, y la Bolsa de Milán con 2,45%. Tras la caída el Eurogrupo aclaró que “los programas de ajuste se hacen a la medida de la situación del país y no hay modelos ni plantillas”.
Las opiniones
Nicos Anastasiades
Presidente de Chipre
“El acuerdo que alcanzamos para el rescate es difícil pero, teniendo en cuenta las circunstancias, es el mejor que podríamos haber logrado”
Jeroen Dijsselbloem
Jefe de ministros de Finanzas del Eurogrupo
“Si el banco no puede hacerlo, entonces hablaremos con los accionistas y los tenedores de bonos y de ser necesario, se lo pediremos a los depositantes de fondos no asegurados”