Gestión de archivos de Epstein por parte del equipo de Trump crea división republicana

La división dentro del Partido Republicano por la publicación de documentos relacionados con el financiero caído en desgracia Jeffrey Epstein siguió ampliándose, y los principales aliados del presidente Donald Trump en el Congreso, incluido el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, pidieron a su administración que ejerza una mayor transparencia.

La creciente controversia ha amenazado con fracturar la base política de Trump, empañando su imagen de reformista valiente y sin restricciones ante los ojos de sus fervientes partidarios y ofreciendo a los demócratas una cuña para explotar.

Aunque el presidente ha intentado apaciguar el creciente revuelo en torno al fallecido delincuente sexual, el martes hubo indicios en el Capitolio de que la disputa estaba lejos de terminar. El representante Thomas Massie, un republicano ultraconservador de Kentucky que ha discrepado frecuentemente con Trump, anunció que presentaría una solicitud de descargo que podría forzar una votación sobre la divulgación de los archivos relacionados con el caso.

Ralph Norman, republicano de Carolina del Sur, se unió a los demócratas que intentaron modificar la legislación sobre criptomonedas para forzar la publicación de todos los documentos relacionados con Epstein. Tim Burchett, republicano de Tennessee, expresó su deseo de escuchar a Ghislaine Maxwell, quien fue condenada en 2021 por participar en los delitos sexuales de Epstein.

Y Johnson, en uno de los ejemplos más notorios del leal a Trump en desacuerdo con la Casa Blanca, le dijo al podcaster de derecha Benny Johnson que la fiscal general Pam Bondi debería "presentarse y explicar" sus comentarios sobre la supuesta lista de clientes de Epstein.

Muchos partidarios de Trump reaccionaron con furia después de que el Departamento de Justicia declarara que no había información adicional para divulgar, señalando que Bondi dijo a principios de este año, en una entrevista con Fox News, que una lista de clientes de Epstein estaba en su escritorio para su revisión.

"Me cae bien Pam; creo que ha hecho un buen trabajo, pero necesitamos que el Departamento de Justicia se centre en las prioridades principales", dijo Johnson. "Estoy deseando dejar esto atrás".

Cabe destacar que el republicano de Luisiana agregó que creía que la “transparencia” era el mejor enfoque para abordar la controversia.

Trump ha gozado de un ferviente apoyo de su base desde su primer mandato y ha cumplido varias promesas de campaña este año, incluyendo medidas drásticas contra la inmigración y la aprobación de una reforma fiscal . Sin embargo, la gestión del caso Epstein —desde hace tiempo un foco de atención para sus partidarios y fuente de numerosas teorías conspirativas— se ha convertido en un grave punto de tensión. Desde el fin de semana pasado, el presidente ha intentado moderarlo.

“No entiendo por qué el caso de Jeffrey Epstein podría interesarle a alguien. Es un asunto bastante aburrido”, dijo Trump el martes. “Está resuelto, pero es aburrido. Y no entiendo por qué sigue así. Creo que, bueno, en realidad solo gente muy mala, incluyendo las noticias falsas, quiere que algo así siga así”.

Más temprano el martes, Trump expresó su apoyo a Bondi, diciendo que ella había manejado la situación "muy bien", aunque su nuera, la presentadora de Fox News Lara Trump, le dijo a Benny Johnson que debería haber "más transparencia" en la investigación.

Trump indicó que Bondi le había proporcionado un informe "muy rápido" sobre la revisión del caso Epstein por parte del Departamento de Justicia y el Buró Federal de Investigaciones, antes de pasar a sugerir, sin pruebas, que los archivos habían sido "inventados" por el exdirector del FBI James Comey, el expresidente Barack Obama y la administración Biden.

En una reunión de gabinete a principios de este mes, Bondi intentó explicar la aparente discrepancia entre el anuncio de que el Departamento de Justicia no tenía una lista de clientes de Epstein para distribuir y su declaración anterior de que estaba en su escritorio.

“Me hicieron una pregunta sobre la lista de clientes, y mi respuesta fue que está en mi escritorio para revisarla, es decir, el archivo, junto con los archivos de JFK y MLK también; eso es lo que quise decir con eso”, dijo.

Trump dedicó gran parte del fin de semana a defender a Bondi e intentar calmar el revuelo, incluso con una publicación en su plataforma de redes sociales Truth. Llamó a los asistentes a la Cumbre de Acción Estudiantil de Turning Point USA en Florida, instándolos a dejar de lado el tema, según una persona al tanto.

Bondi declaró el martes que no tenía intención de renunciar y prometió permanecer en el cargo mientras Trump lo desee, pero se negó a responder preguntas sobre si se publicará más información sobre el caso Epstein. Aseguró que la saga de Epstein no ha afectado las operaciones del Departamento de Justicia y que está trabajando estrechamente con el director del FBI, Kash Patel, en las prioridades de las fuerzas del orden.

Sin embargo, se negó a describir su relación con el subdirector del FBI, Dan Bongino, quien anteriormente planteó preguntas sobre el manejo del caso Epstein como podcaster.

Trump dijo a los periodistas el domingo que creía que Bongino, un ex agente del Servicio Secreto, planeaba permanecer en la administración.

"Oh, creo que sí", dijo. "Hablé con él hoy. Dan Bongino, es una gran persona. Lo conozco desde hace mucho tiempo, he hecho su programa muchas veces. Y sonaba genial, la verdad. No, creo que está en buena forma".

Una encuesta de CNN realizada por SSRS y publicada el martes subrayó la vulnerabilidad política que enfrentan Trump y sus aliados en relación con el caso. Tan solo el 3% de los estadounidenses se declara satisfecho con la cantidad de información que el gobierno ha publicado sobre Epstein. Cuatro de cada 10 republicanos se muestran activamente insatisfechos con la información compartida por la administración, mientras que el 52% de los votantes independientes opina lo mismo.

Epstein se declaró culpable en 2008 de cargos en Florida, incluyendo el de prostitución de menores. Falleció en una cárcel de Manhattan en 2019 mientras esperaba su juicio por cargos federales de tráfico sexual de menores. Tanto un médico forense como una investigación del FBI determinaron que Epstein se suicidó.

Los legisladores conservadores llevan meses luchando por mantener el equilibrio entre la agenda legislativa del presidente y las promesas que han hecho a los votantes que exigieron fuertes recortes del déficit y han pedido durante mucho tiempo una mayor transparencia sobre Epstein.

El martes, los demócratas de la Cámara de Representantes intentaron obligar a los republicanos a votar sobre el tema. Un día antes, el líder de la minoría de la Cámara, Hakeem Jeffries, afirmó que el Congreso debería forzar la publicación de los archivos si la administración no los publica por iniciativa propia.

“El pueblo estadounidense merece saber la verdad”, declaró el demócrata neoyorquino a la prensa en el Capitolio. “¿Qué ocultan, si acaso ocultan algo, la administración Trump y el Departamento de Justicia?"