EE.UU.

Glencore busca comprador para la problemática mina de níquel de Nueva Caledonia

Gráfico LR

La compañía multinacional de materia primas buscará salir, este año, de una participación de 49% que tiene en Koniambo Nickel

Bloomberg

Glencore planea vender su participación en una mina de níquel y una planta de procesamiento en las islas de Nueva Caledonia tras la drástica caída de los precios.

El principal comerciante de materias primas del mundo tratará de vender su participación de 49% en Koniambo Nickel, según un comunicado de KNS. La empresa comenzaría "sin demora" a suspender las operaciones en su planta de ferroníquel mientras se encuentra un nuevo inversor.

Se trata de la última víctima de la caída de los precios del níquel, provocada por la avalancha de nuevos suministros procedentes de Indonesia. El auge de la producción de este país ya ha obligado a cerrar varias minas en Australia, a pesar de la creciente demanda del metal por parte del sector de los vehículos eléctricos.

El gobierno francés, que controla Nueva Caledonia, ha estado sopesando un rescate para la industria del níquel de las islas, acosada desde hace tiempo por contratiempos técnicos, altos costes y malestar social. París ha ofrecido una reducción de los precios de la energía de unos 200 millones de euros (US$216 millones) al año, según informó Bloomberg el mes pasado.

"Durante más de diez años, Glencore ha sido el principal financiador de KNS sin obtener nunca beneficios", declaró Glencore en otro comunicado. "Incluso con la ayuda propuesta por el gobierno francés, los altos costes operativos y las actuales condiciones del mercado del níquel, muy débiles, hacen que KNS siga siendo una operación no rentable".

Glencore declaró el año pasado que dejaría de financiar Koniambo a finales de febrero. La empresa pretendía seguir siendo accionista, pero había propuesto cerrar la planta industrial y dedicarse a la exportación de mineral de níquel, según informó Bloomberg el mes pasado.

Hacerlo sería controvertido por los puestos de trabajo locales que se perderían. Además, intensificaría el control de Asia sobre la cadena de suministro de níquel, tras la enorme expansión de la capacidad de procesamiento en China e Indonesia.

La planta se mantendrá bajo cuidado y mantenimiento durante seis meses, durante los cuales sus empleados seguirían cobrando. Las acciones de Glencore subieron hasta 1,5% en las primeras operaciones de Londres.

El operador de materias primas rival, Trafigura Group, y la francesa Eramet también poseen participaciones en minas y plantas de níquel de Nueva Caledonia, que se enfrentan a problemas de liquidez similares. París ha pedido a Trafigura que aporte más capital a Prony Resources Nouvelle-Caledonie, en la que tiene una participación del 19%.

Pero la empresa suiza se negó, obligando a Prony a buscar un nuevo inversor. Francia prepara un préstamo puente para la empresa, propietaria de la mina de Goro y de una planta de transformación en las islas.

TEMAS


Glencore - Glencore Plc