Gobierno de Daniel Noboa reestructura su gabinete tras la derrota en referéndum
viernes, 21 de noviembre de 2025
Los cambios incluyeron el nombramiento de Juan Carlos Vega, el primer titular de finanzas de Noboa, a cargo de la Cartera de Agricultura
Bloomberg
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, reestructuró su gabinete tras la sorpresiva derrota en un referéndum en el que buscó respaldo ciudadano para reformar la Constitución y enfrentar el aumento de la delincuencia.
Los cambios incluyeron el nombramiento de Juan Carlos Vega, el primer titular de finanzas de Noboa, a cargo de la Cartera de Agricultura, mientras que Sariha Moya se mantuvo al frente del Ministerio de Economía y Finanzas.
“Con el objetivo de fortalecer la gestión pública, el Primer Mandatario, Daniel Noboa, ha dispuesto una serie de ajustes en el gabinete”, informó la Presidencia en un comunicado publicado en X.
La mayoría de los cambios consistieron en el intercambio de carteras entre ministros actuales, con la vicepresidenta María José Pinto asumiendo el sensato Ministerio de Salud. No se anunciaron ajustes en las carteras de Defensa ni del Interior, en medio de la profunda crisis de seguridad que atraviesa el país. La portavoz del gobierno, Carolina Jaramillo, presentó su renuncia y aún no se ha nombrado un reemplazo.
Con más de 99% de los votos escrutados, los ecuatorianos rechazaron las cuatro preguntas del referéndum del domingo con márgenes de entre 53,7% y casi 62%. La propuesta de Noboa de convocar una asamblea para reescribir la Constitución del país andino fue la que menos apoyo obtuvo.
Los US$15.000 millones en bonos ecuatorianos, que figuraban entre los de mejor desempeño a nivel mundial este año, cayeron en toda la curva el lunes tras conocerse la derrota. Los títulos con vencimiento en 2035 bajaron hasta 3,4 centavos, en su peor caída intradía desde febrero, y extendieron las pérdidas el martes.
El revés electoral surgió tras una breve campaña en la que la mayoría de las encuestas pronosticaban apoyo mayoritario a las preguntas del plebiscito.
El mandatario, de 37 años, se ve ahora obligado a redefinir su estrategia. La seguridad sigue siendo su prioridad, en un país que sufre una de las tasas de homicidios más altas del mundo, con casi 50 asesinatos por cada 100.000 habitantes. Gran parte de la violencia se atribuye a disputas territoriales y luchas internas tras el arresto de varios cabecillas de bandas criminales.
Otros desafíos destacados incluyen la deficiente calidad de los servicios públicos de salud y el bajo nivel de empleo formal. Mientras tanto, la producción petrolera sigue en declive desde los dos gobiernos anteriores, privando al Estado de ingresos clave.
Las finanzas públicas dependen del Fondo Monetario Internacional y de otros organismos multilaterales para estabilizar el financiamiento. El gobierno está cumpliendo, hasta el momento sin contratiempos, un programa de US$5.000 millones a cuatro años con el Fondo.