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Grecia pidió extensión crediticia a la zona euro y ofreció grandes concesiones

Reuters

Con su programa de rescate de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a punto de expirar en poco más de una semana, el Gobierno de izquierda del primer ministro Alexis Tsipras necesita urgentemente asegurarse un financiamiento vital para mantener a flote a su país más allá de finales de marzo.

Los ministros de Finanzas de la zona euro se reunirán hoy  por la tarde en Bruselas para estudiar la solicitud, dijo el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, en un tuit.

Eso elevó la esperanza de un acuerdo para evitar la posible quiebra y una salida de Grecia del bloque de 19 naciones que comparte la divisa.

Un funcionario del Gobierno dijo a Reuters que Atenas había pedido una extensión a su “Acuerdo Marco de Ayuda Financiera” con la zona euro. Pero insistió en que el Ejecutivo estaba proponiendo diferentes condiciones a las obligaciones del actual rescate.

Grecia se había comprometido a mantener el equilibrio fiscal durante el periodo provisional, realizar reformas inmediatas para luchar contra la evasión fiscal y la corrupción, y tomar medidas para lidiar con lo que Atenas denomina su “crisis humanitaria” y comenzar con el crecimiento económico, dijo.

En el documento visto por Reuters, Grecia prometió cumplir con sus obligaciones financieras con todos los acreedores, reconocer la existencia del programa de la UE y el FMI así como el marco legal vinculante y abstenerse de tomar acciones unilaterales que minarían los objetivos fiscales.

De forma crucial aceptó que la extensión fuera vigilada por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI, un paso atrás para Tsipras, que había prometido terminar con la cooperación con los inspectores de la llamada “troika” a los que acusa de infligir un profundo daño económico y social a Grecia. 

El periodo provisional de seis meses se empleará para negociar un acuerdo a largo plazo para la recuperación y el crecimiento dando más alivio de deuda en unas medidas prometidas por el Eurogrupo en 2012.

Los socios de la zona euro de momento han dicho que Atenas debe cumplir con las condiciones del actual acuerdo, que requiere que haya un superávit presupuestario primario del 3% este año, antes de los pagos del servicio de deuda.

Funcionarios de altos cargos de la zona euro tienen previsto conversar por teleconferencia el jueves para debatir la solicitud de Grecia. Las palabras elegidas podrían ayudar a satisfacer al menos algunas de las preocupaciones que han mantenido en vilo el acuerdo en las dos últimas semanas, permitiendo a Atenas evitar decir que está prolongando el actual programa, al que se opone, mientras los acreedores pueden evitar aceptar un “acuerdo crediticio” sin condiciones.