Huawei presenta demanda contra gobierno de EE.UU. por restringir sus operaciones
jueves, 7 de marzo de 2019
Lo hizo argumentando que hay una ley que limita sus negocios en ese país es inconstitucional.
Reuters
El fabricante chino de equipos de telecomunicaciones Huawei Technologies demandó el jueves al gobierno de Estados Unidos argumentando que una ley que limita sus negocios en ese país es inconstitucional, y aseguró que está luchando contra un gobierno empeñado en sacar a la empresa de los mercados globales.
Huawei dijo que presentó una demanda en una corte federal de Texas que impugna la Sección 889 de la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA, por sus siglas en inglés), promulgada en agosto por el presidente estadounidense, Donald Trump, la cual prohíbe a las agencias federales y sus contratistas adquirir equipos y servicios de la empresa china.
La demanda marca la última confrontación entre China y Estados Unidos, que estuvieron gran parte de 2018 aplicándose mutuamente aranceles a las importaciones de bienes por miles de millones de dólares. El año terminó con la detención de la directora financiera de Huawei en Canadá a solicitud de Washington, un hecho que generó indignación en Pekín.
Mucho antes de que Trump iniciara la guerra comercial, las actividades de Huawei estaban bajo el escrutinio de las autoridades estadounidenses, según entrevistas con 10 personas familiarizadas con las investigaciones y documentos relacionados con las pesquisas vistos por Reuters.
"El Congreso de Estados Unidos ha fallado repetidamente en presentar pruebas que respalden sus restricciones sobre los productos de Huawei. Estamos obligados a llevar a cabo esta acción legal como último recurso", dijo en un comunicado el presidente rotatorio de Huawei, Guo Ping.
"Esta prohibición no solo es ilegal, sino que también restringe a Huawei de participar de una competencia justa y, en última instancia, perjudica a los consumidores estadounidenses. Esperamos el veredicto de la corte", agregó.
Si bien Huawei tenía muy poca participación en el mercado estadounidense antes del proyecto de ley, es el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones del mundo y aspira a estar a la vanguardia del despliegue mundial de redes y servicios móviles de quinta generación (5G).
En su demanda, Huawei aseguró que sus "equipos y servicios están sujetos a procedimientos de seguridad avanzados", y no se han documentado (...) vulnerabilidades de seguridad intencionales en cualquiera de los más de 170 países del mundo donde se utilizan los equipos y servicios" de la empresa.
La firma de propiedad privada se ha embarcado en una ofensiva legal y de relaciones públicas ante la presión de Washington a sus aliados para que dejen de contratar sus servicios al desarrollar redes 5G.
"El gobierno de Estados Unidos no escatima esfuerzos para difamar a la compañía y engañar al público", dijo Guo en una conferencia de prensa en la sede de Huawei, en el sur de China.
La ley Ndaa prohíbe al gobierno de Estados Unidos hacer negocios con Huawei, la también china ZTE Corp o cualquier compañía que tenga equipos de ambas firmas como un "componente sustancial o esencial" de sus sistemas.
Huawei argumenta en su demanda que la sección en cuestión es ilegal porque podría limitar considerablemente la capacidad de la empresa para hacer negocios en Estados Unidos a pesar de que no hay pruebas de irregularidades.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lu Kang, dijo que no tenía información sobre si el gobierno de su país también buscará tomar acciones legales contra esta ley estadounidense, pero sostuvo que la decisión de Huawei es "totalmente razonable y comprensible".