Hungría y Colombia son los países de la Ocde con los precios más elevados en energía

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, Ocde, reveló las cifras de la inflación energética para el mes de julio, mostrando un incremento a nivel general de 2,1% con respecto a junio (-9,6%). En julio esta cifra, para el bloque, se ubicó en -7,5%.

Este indicador es considerado como uno de los de mayor relevancia porque evalúa el desempeño de los países miembros de esta organización, además de que tiene una relación muy importante con la inflación en general, según los especialistas.

En todo caso, se debe entender qué es lo que mide este índice, para evitar caer en la confusión de que solo se habla de los precios de la energía eléctrica.

El exnegociador del acceso de Colombia a la Ocde, Sebastián Trujillo, explica que la inflación energética, además, de medir los precios de la electricidad, también incluye los valores del gas y otros combustibles, incluyendo lubricantes destinados a los usuarios finales. “En muchos casos puede ser el precio final directo, pero en otros casos los precios del petróleo determinan el valor de la energía por el tipo de generación de cada país”.

Los de mayor inflación

Los países que registran mayor inflación energética, de acuerdo con el ranking presentado por la organización son Hungría y Colombia, con 28,9% y 22,3%, respectivamente. Seguido de estos dos países se encuentra República Checa con 13,7%. Alemania aparece como la cuarta nación de la Ocde con mayor inflación energética con una variación de 6,2%, le siguen Eslovaquia (5,0%), Polonia (4,5%) Australia (4,1%) e Italia con (0,6%).

Con respecto a la situación de Colombia, los analistas coinciden en que los efectos climáticos le están siendo determinantes para los precios de la energía. Además, explican que cada vez que el país atraviesa por el fenómeno del Niño, los valores tienden a elevarse.

“Cuando el país se encuentra en esta temporada, los precios tienden a elevarse debido a la reducción en la disponibilidad de energía hidroeléctrica, que es la generada por agua, una fuente de energía más económica, lo que resulta en un mayor uso de centrales térmicas”, esta última considerada como una de las fuentes de energía más costosas, según Esteban Quintana, ingeniero eléctrico y CEO de Klik Energy.

Dice que es muy probable que este efecto se intensifique hacia final de 2023 y primer trimestre de 2024.

Con respecto a Hungría, que es el país que registra la mayor inflación en materia energética, tanto Quintana como Trujillo aseguran que las causas van más allá del tema ambiental.

Trujillo le atribuye las alzas a que en el país de Europa central se levantaron los topes y subsidios a las tarifas que se habían impuesto hace poco más de una década. “Por esto subieron los precios, se dio un ajuste”, explica el exnegociador y experto en temas de la Ocde.

Quintana le añade a esta explicación que en Hungría están afectados por la dependencia al gas ruso que se ha encarecido como consecuencia del conflicto bélico con Ucrania.

Inflación en negativo

El resto de países de la organización registraron esta variación en negativo. Irlanda tuvo la inflación energética en -1,3% al igual que Suiza. Islandia registró este valor en -1,4%. Chile, el otro país de América del Sur perteneciente a esta organización marcó -3%. Por su parte, Francia registró -3,1%.

El bloque de países de la Unión Europea en general tuvo una inflación energética de -4,4%. En el caso de Finlandia y Austria, ambas naciones registraron este índice en 4,5%.

Israel fue otro de los países de la Ocde que ha logrado mantener control en los precios de la energía, su índice fue de -5%, seguido de Latvia con -5,3%. En el caso de la Eurozona, el índice se ubicó en -6,1%.

Nueva Zelanda registró -6,9%. México fue el segundo país de América Latina con menor inflación en los precios de la energía, con -7,7%. Por su parte, los países pertenecientes al G7 obtuvieron en su conjunto -8%. Canadá y Reino Unido registraron -8,2% cada uno y les siguió Eslovenia con -8,3%.

Quintana, afirma que la inflación energética baja en algunos países es el resultado de haber logrado una matriz de generación de energía renovable bastante robusta.

“Esto les ha permitido requerir de poca generación térmica para respaldar y garantizar la estabilidad de su suministro energético. Esto los hace menos vulnerables en un momento en el que los precios del gas han aumentado en todo el mundo debido a los conflictos mencionados”, explica.

Los de menos inflación

Japón se ubicó en el listado con -8,7%, después le sigue Noruega, con -9,1%; Corea del Sur (-9,2%), Luxemburgo (-9,4%), Estonia (-10%) y Lituania (-10,8%). El listado de 10 países con menor inflación energética es liderado por España.

El país ibérico registró este valor en -24%, le sigue Bélgica que registró en julio un valor de -24,1%, en tercera posición se ubica Países Bajos con -21,4%, seguido de Grecia (-19,1%), Costa Rica (-18,9%), Dinamarca (-17,4%), Portugal (-14,9%), Suecia (-13,9%), Turquía (-12,8%) y Estados Unidos (-12,5%).

Trujillo, explica que una parte importante de la caída de los precios de energía en los países del bloque tiene que ver con la caída en los precios del petróleo, que desde finales de 2022 presentaron bajas importantes, aunque en la actualidad los valores están rozando los US$100 por barril.

“Sin embargo, habrá que esperar qué sucede con las decisiones de la Opep, y en Rusia, cuyo impacto determinará el precio de energía”, explica el analista.

Algo que aclaran los analistas, es que los países no pueden controlar este índice porque este depende meramente de factores exógenos como los precios del petróleo y el clima.

Inflación general entre los países de la Ocde en la lupa de la organización

Los precios de la energía, que incluyen precios del gas y otros combustibles, jugaron un papel importante en el índice de inflación general de la Ocde en julio. Este valor se ubicó en 5,9%. Algo en lo que coinciden los analistas es en que la subida en los precios del petróleo, de seguir así, causará un repunte de la inflación en varias regiones del mundo, pese a que en algunos países ya se empiezan a mostrar algunos signos de desaceleración en los incrementos de los índices de precios al consumidor, incluyendo a Colombia.